Reduce tu consumo eléctrico con contadores prepago

Que el viajero pague por los kWh que consuma en tu alojamiento. Esa es la propuesta de los contadores prepago: una aparato de control del suministro eléctrico a través de una tarjeta con saldo.

El funcionamiento es parecido al de los móviles prepago. Consume energía cuando hay saldo y se corta cuando se agota. El propietario no recibe sorpresas al final de mes y el viajero modera su consumo. ¿Todo son ventajas? Respondemos a las preguntas habituales que suscita este método de ahorro.

1. ¿Qué es un contador prepago?

Es un dispositivo que se instala en el cuadro eléctrico de cada alojamiento. Para permitir el paso de la corriente al alojamiento se debe insertar una tarjeta con saldo.

Los contadores muestran el consumo y el saldo disponible. Antes de que se agote, el contador emite una señal de aviso. Si los viajeros quieren añadir saldo, el propietario lo añade desde el software de control instalado en su ordenador.

Si el viajero no consume todo el saldo, se le restablece en metálico.

2. ¿Cuáles son sus ventajas?

Evita el despilfarro energético de los viajeros. Este es su principal valor. Los contadores permiten un uso racional de la energía en el alojamiento alquilado.

Aumenta la tranquilidad de los propietarios ante la factura de final de mes. Con ello, se pueden prever con precisión los gastos fijos del negocio y establecer reducciones o bonificaciones sobre el precio final para el cliente.

La calefacción en invierno es uno de los principales problemas de los propietarios. Algunos han visto a sus clientes con la temperatura por las nubes, en manga corta y las ventanas abiertas.

3. ¿Y los inconvenientes?

Los contadores prepago se limitan al uso eléctrico. Quedan excluidos los alojamientos que apuesten por otro sistema de calefacción, por ejemplo el gasóleo o biomasa.

La inversión inicial, entorno a unos 800€ de media, es un obstáculo para apostar por el sistema de contadores. Se debería estimar el tiempo de retorno de la inversión.

Otras soluciones pasan por la instalación de energías renovables o tecnología domótica para el control a distancia de la energía en el alojamiento. Mira cómo domotizar tu casa rural en 4 pasos.

4. ¿Dónde conseguirlos?

Al menos dos empresas venden los contadores prepago a través de internet. También ofrecen servicio de instalación y una breve formación.

• Eco Contadores Prepago. Tienen oficinas en Madrid, Asturias y Barcelona.
• Ecocontadores. Tienen oficina en Cádiz.

5. ¿Cuánto cuestan los contadores?

Desde 682€ el kit básico hasta los 3.125€

para sistemas de 10 contadores (10 alojamientos). Desde Eco Contadores Prepago ofrecen distintas formas de pago y alquiler en función de las necesidades de cada caso.

6. ¿Cuáles son los componentes del sistema?

• 1 Contador prepago
• 1 Lector-grabador de tarjetas: se conecta al ordenador. El programa (software) permite cargar las tarjetas de saldo o devolver el dinero no consumido al viajero.
• 1 Software de control: programa para gestión de tarjetas y del sistema de los contadores.
• 3 Tarjetas chip recargables
• Instalación de los equipos

7. La opinión del propietario

Sergio Cabrera es el propietario del Balneario Rural Mirador de Miranda, en Asturias.

Sergió instaló los contadores prepago hace dos años. Asegura que el consumo se ha reducido un 30% y que además puede ofrecer servicios adicionales a los clientes. «A cambio de que paguen su consumo, puedo regalar horas extras del check out, ampliar el horario del balneario, etc.».

Sobre la aceptación de los viajeros Sergio defiende que mucha gente lo aprecia: «en general son gente comprometida con el medio. Con este sistema ganamos todos. Eso sí: tienen que tener la información durante la reservas, que ya estén de acuerdo al llegar».

¿Y cuál es el coste que asumen los viajeros? «En un apartamento de unos 80 m2 para 4 sale sobre 1,50€ por persona y noche en verano. En invierno, sobre los 2€». Sergio explica que la reducción que practica sobre el alquiler es mayor que el gasto que asumen los viajeros. «Al final se trata de que los clientes se comporten como en su casa«.

«Es un tema cultural. Para los extranjeros es algo normal. ¿Quién pensaba antes en poner tres contenedores de basura en la cocina para reciclar? ¿Te imaginas el ahorro para el medio si todas las casas pusieran contadores?», concluye.