La torre modernista de Sant Joan Despí que enamoró a John Malkovich

Escrito por

01.04.2024

|

5min. de lectura

Torre de la Creu, torre modernista de Sant Joan Despí
Torre de la Creu, la torre modernista de Sant Joan Despí. Por Quim Roser

En 1999, el director de cine Spike Jonze estrenó una película que, como poco, podría calificarse de curiosa. Titulada Cómo ser John Malkovich cuenta la historia de un marionetista callejero llamado Craig Schwartz que siente que su vida ha llegado al final de un ciclo y necesita empezar uno nuevo.

A su lado está su mujer Lotte, con quien lleva casado diez años y está obsesionada con su empleo en una tienda de animales. Pero lo más sorprendente del filme no son las características de los personajes sino que Craig consigue un trabajo en la planta siete y media del edificio Mertin-Flemmer de Manhattan, donde hay una puerta que da acceso al cerebro del mismísimo John Malkovich.

Por supuesto, la historia no está basada en hechos reales, pero si alguien tuviese la capacidad de introducirse en el pensamiento del actor, posiblemente se encontraría con un montón de datos sobre arquitectura modernista. En concreto, de la obra de Josep Maria Jujol, conocido por mucha gente por ser un estrecho colaborador de Antonio Gaudí.

Torre de la Creu
Torre de la Creu. Por Quim Roser

Sin embargo, ese título, sin dejar de ser cierto, es un tanto injusto ya que el tarraconense desarrolló una carrera propia de gran relevancia. Tanto, que cuando el intérprete estadounidense visitó Tarragona en 2010 con motivo del centenario del teatro Metropol expresó su devoción por Jujol, arquitecto del edificio.

Según contó en el evento, su primer encuentro con la obra del arquitecto fue en Barcelona, ante la Casa Planells. El actor sintió algo cercano al síndrome de Stendhal y su interés por el trabajo de Jujol le llevó a la iglesia de Vistabella, en La Secuita; la Casa Negre y, cómo no, a la Torre de la Creu de Sant Joan Despí también conocida como torre dels Ous (torre de los huevos) por sus cúpulas ovales. 

“Es un entusiasta del trabajo de Jujol”

En 2012, volvió a contar que su gusto por la arquitectura viene de la influencia de su padre, que había sido restaurador y reiteró su admiración por Josep María Jujol. En esta ocasión fue en un acto celebrado en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) en honor al arquitecto modernista.

“Es un entusiasta del trabajo de Jujol”, explican a Escapada Rural desde la dirección del Centre Jujol-Can Negre de Sant Joan Despí. En esta localidad hay varias edificaciones firmadas por el arquitecto como la propia Can Negre, la casa Serra-Xaus y la Torre de la Creu. Esta última se construyó a principios del siglo XX como residencia para dos familias, pero desde 2003 es propiedad del Ayuntamiento. 

Torre de la Creu
Torre de la Creu. Por Quim Roser

“Fue un encargo de Josefa Romeu i Grau de Gibert, una tía de Jujol, en 1913 y es una casa pensada para veranear aquí”, dice la directora del centro. “En principio eran dos casas adosadas y el alquiler de una pagaba la otra. Después se fue pasando de mano en mano hasta que se llegó al punto de que ahora forma parte del patrimonio de Sant Joan Despí”. En el año 2023 pasaron por la torre unas 3.100 personas, según datos de la institución que la gestiona.

El edificio, que se terminó de construir en 1916, tiene cinco cilindros metálicos en su interior que son donde se sitúan las estancias de diferentes tamaños a las que se accede por una escalera de caracol. Lo más llamativo desde el exterior son las cúpulas con forma de huevo mencionadas y su acabado de mosaico cerámico elaborados con restos de vidrio de la fábrica de Cornellà, que le da color. La torre está rodeada de jardines y una valla de hierro forjado.  

Torre de la Creu
Torre de la Creu. Por Quim Roser

En 1966, el arquitecto Lluís Bonet i Garí hizo una reforma para reunificar el interior de la torre y convertirla en una vivienda única a petición de su propietario por entonces Manuel Parellada. En 1988, Joan Bassegoda Nonell, también arquitecto, reacondicionó el sótano de la torre, que durante cuatro años funcionó como centro de día para personas con problemas de salud mental. 

Pero a mediados de la primera década de los 2000, cuando el Colegio de Arquitectos de Cataluña tenía su sede en el edificio por cesión del Ayuntamiento de Sant Joan Despí, Josep Llobet i Gelmà recuperó parte de su estructura original. En 2003, la Torre de la Creu fue declarada Bien Cultural de Interés Nacional.

Las huellas de Jujol

Santuari de la Mare de Déu de Montserrat
Santuari de la Mare de Déu de Montserrat de Montferri. Por KarSol

Además de las enumeradas hasta ahora, Jujol dejó su huella en muchas partes de Cataluña. Un ejemplo es la casa Bofarull, situada en el municipio de Tarragona Els Pallaresos, que el arquitecto ideó para las hermanas apellidadas como la vivienda en 1920. Su visita se encaja dentro de la ruta modernista de Tarragona, que también incluye una parada en la casa del doctor Ximenis, canónigo de la catedral de la ciudad, en 1914 y obras religiosas como algunos detalles de la iglesia de San Juan Bautista de San Juan Despí.

El doctor Pere Santaló Castellví fue quien presentó a Josep Maria Jujol y Antonio Gaudí, cuando el primero aún estaba cursando la carrera en la universidad. Ambos trabajaron juntos en muchas ocasiones y los rumores de que algunas de las creaciones del más conocido son obra del joven son muy habituales, aunque no del todo probados. 

Sí que hay algunas construcciones firmadas por Jujol que hacen clara referencia a su empleador como el santuario de Montferri también conocido como la segunda Sagrada Familia. La línea entre la inspiración y la copia puede ser muy delgada pero en este caso no hay peligro: el padre de la Torre de la Creu de Sant Joan Despí demostró sobradamente su talento con sus construcciones como se puede apreciar a día de hoy.

Carmen López

Etiquetas

Si te ha gustado, compártelo

¿Estás pensando en tu próxima escapada?

Publicidad

Comentarios

Si te gusta escaparte, te gustará nuestra newsletter

Te enviamos recomendaciones personalizadas para que tu próxima escapada sea inolvidable. ¿Te unes?