Casa dos Pedrouzos

Todo bien menos las escaleras

Gema Pedreda

Casa dos Pedrouzos

La casa no es adecuada para niños pequeños ni personas mayores o con movilidad reducida porque no se puede acceder a ningún espacio sin subir o bajar escaleras, incluso una de las dos bañeras con las que cuenta tiene tres escalones. El único sitio sin escaleras es la cocina, pero para pasar de esta al salón hay que bajar. Al tener muchos recovecos y techos altos, se hace difícil calentar la casa solo con los radiadores, aunque hay una chimenea y leña en el exterior. No obstante, está bien equipada y limpia, y la anfitriona es muy agradable, atenta y siempre dispuesta a ayudar en todo lo necesario.

Muy recomendable

Cristina Bujeda Gomez

Casa dos Pedrouzos

Hemos pasado unos días en Julio y la experiencia ha sido maravillosa. La casa preciosa, muy amplia, superlimpia y perfectamente equipada. Rodeada de un amplio terreno, con porche y barbacoa. Para disfrutarla al máximo. Situada en un entorno rural, muy tranquilo, ideal para excursiones en los alrededores pero también muy proximo a la Autovía, lo que permite desplazarse con facilidad a muchos lugares de interés como los Ancares, el Bierzo e incluso visitar las murallas de Lugo y otras comarcas gallegas. Tereisa, la dueña, es una excelente anfitriona y una bellísima persona. Muchísimas gracias. Hemos sido muy felices en vuestra casa.

Todo perfecto

Josep Iglesias Baliarda

Casa dos Pedrouzos

Hemos estado alojados en la casa durante doce días y la experiencia ha sido totalmente satisfactoria.La casa confortable y totalmente equipada.La cocina amplia y con todo lo necesario.Las camas y la ropa de cama de calidad.El entorno bucólico y tranquilo.Los comercios a cinco minutos en coche.La atención de Teresa tanto a la llegada como durante la estancia amable y servicial.La situación y el acceso a la autovía permite desplazamientos rápidos a muchos sitios emblemáticos del territorio.Totalmente recomendable.

Fin de semana transquilo y agradable

Eva Abalde

Casa dos Pedrouzos

Nos hemos sentido como en casa y el trato por parte de Moncho ha sido excelente. Es acogedora y espaciosa, en el interior, Zona exterior también amplia. Y la cocina completísima, tiene de todo lo que puedas necesitar. Las vistas, tienen que ser increíbles con nieve, pero ahora, es espectacular la gama de colores de otoño que había en los arboles del jardín y alrededores. Recomiendo esta casa sobre todo a gente que viva en la ciudad o fuera de Galicia, ya que está decorada con muchísimos elementos típicos de la región. Ha sido un fin de semana genial, tranquilo y agradable, creo que no se puede definir de mejor.