7 tesoros romanos en España (y alguno más)

Puede que una de las escenas más divertidas de la muy divertida película La vida de Brian de los Monty Python sea la que representa una reunión del Frente Popular de Judea, que quiere luchar contra la opresión del Imperio romano. En pleno mitin, uno de los responsables lanza una pregunta al aire “¿Qué han hecho los romanos por nosotros?”, convencido de que no hay ninguna respuesta positiva. Pero cuando los asistentes al encuentro comienzan a reflexionar se les ocurren cosas como la sanidad, la educación, el vino, el alcantarillado o el acueducto. 

Por supuesto, ninguno de esos beneficios sociales justifican la invasión y el sometimiento de ningún pueblo, pero esa es otra discusión. El caso es que en España aún quedan vestigios de las obras que realizaron los romanos en su paso por la península ibérica –Hispania, por aquel entonces– durante siete siglos, empezando por el año 218 a.c en el calendario romano prejuliano y para el Imperio romano el año 536 ab urbe condita (desde la formación de la ciudad de Roma). 

Acueducto de Segovia

Hablando de acueductos como los humoristas británicos, en esta localidad de Castilla y León se encuentra una de las construcciones más representativas de lo que el Imperio romano nos dejó en herencia. Según algunas investigaciones, se erigió alrededor del siglo II d.c, mide 28 metros de altura en su parte más elevada y 15 kilómetros de longitud. Su función es recoger agua del manantial de Fuentefría y transportarla hasta el centro de la ciudad.

En 1985, la Unesco declaró tanto al casco histórico de Segovia como a su acueducto Patrimonio de la Humanidad. Aunque se ha mantenido en perfecto estado durante siglos, a día de hoy la contaminación y la erosión del granito han hecho que se deteriore. Para asegurar su mantenimiento, durante ocho años se han realizado trabajos de restauración dirigidos por el arquitecto Francisco Jurado. Además, desde hace casi 30 años los coches ya no circulan bajo sus arcos.

Ciudad Itálica de Santiponce

En este municipio de Sevilla se ubican los yacimientos de lo que fue una ciudad erigida por los romanos en el año 208 a.c, la primera que situaron en Hispania y también la primera en construirse fuera de Italia. Todo el conjunto es interesante, pero tiene algunos puntos fuertes: los mosaicos, las termas, el acueducto y, sobre todo, el anfiteatro. Es uno de los tres más grandes de lo que fue el Imperio y se hizo famoso mundialmente por la serie 

Juego de Tronos lo convirtió en el anfiteatro de Pozo Dragón. Puede que esta ficción haya sido la mayor embajadora audiovisual del país en los últimos tiempos.

Además, en esta urbe vivieron los emperadores Adriano y Trajano –que dio nombre a un templo que también se puede visitar–, un signo de que no era un mal sitio para residir. Entre los restos que se conservan también se pueden observar las estructuras de algunas casas.

Tarraco, actualmente Tarragona

Es bastante sorprendente la facilidad con la que en Tarragona se da un salto en el tiempo con solo cruzar una calle. De pronto se está en el siglo XXI y, una vez se cruza el semáforo en verde, se llega a la época del Imperio romano, cuando esa ciudad que, en su momento se conocía como Tarraco, era una de las más importantes de Hispania. Actualmente, la ‘atracción’ principal es el anfiteatro con vistas al mar que aún se conserva en el centro de la ciudad.

En el año 2000 el conjunto arqueológico de Tarraco fue declarado Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Además del mencionado anfiteatro, otras joyas de la arquitectura romana que se pueden ver son: el acueducto, las murallas, el circo o el foro provincial. En el Museo Nacional Arqueológico de Tarragona se puede encontrar toda la información necesaria para conocer al dedillo lo que fue este asentamiento. 

La Torre de Hércules de A Coruña 

Tiene el orgullo de ser el único faro romano más antiguo que aún sigue en funcionamiento y cumpliendo su función primigenia, que es la de ayudar en la navegación. Su construcción se calcula entre el siglo I a.c y el siglo II a.c y su situación es una colina rocosa que se eleva 57 metros y que se llama Punta Eiras. 

Es el tercero más alto de España –por delante están el de Chipiona y el de Maspalomas– y en junio de 2009 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Teatro romano de Mérida

Cuando la que actualmente se conoce como Mérida aún se llamaba Augusta Emerita, allá por el año 15 a.c (aproximadamente), se inauguró el teatro cuya construcción promovió el cónsul Marco Vipsanio Agripa. Desde el año 1993 es Patrimonio de la Humanidad como parte del conjunto arqueológico de Mérida. 

El arquitecto José Menéndez-Pidal lo bautizó como ‘príncipe entre los monumentos emeritenses’ y, sin duda, es uno de los más importantes que se conservan en España.

Ha sufrido diversas remodelaciones y hubo épocas en las que su deterioro solo hacía visibles algunas partes, pero en 1962 se hizo una reconstrucción importante gracias a la cual se puede ver como está en la actualidad. Desde 1933, cada verano se celebra el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, uno de los más importantes de España y una de las fechas ‘marcadas en fluorescente’ en el calendario cultural nacional.

Parque arqueológico de Segóbriga

Aunque también tiene restos del paso de los celtas por la Península, aquellas personas interesadas en el Imperio romano tienen la oportunidad de hacerse una idea de cómo se desarrollaba la vida en una ciudad de la época. Pese a que lo que se pueden ver son ruinas, es uno de los yacimientos romanos mejor conservados del país. 

La urbe estuvo impulsada por el emperador Augusto y aún hoy se pueden visitar el anfiteatro, el circo, el gimnasio, la muralla, el foro o  la acrópolis. Su ubicación exacta es el cerro de Cabeza de Griego en la localidad de Saelices, en Cuenca. 

Puente romano de Alcántara

Con 58,2 metros de altura y una longitud de 194 metros, atraviesa el río Tajo y es una de las obras de ingeniería más importantes que los romanos cimentaron en Hispania. Se construyó entre los años 103 a.c y 104 a.c, tiene seis arcos de medio punto y cinco pilares. 

Además, a cada lado tiene una inscripción que indica que se levantó en honor al emperador romano Trajano y en el templete que se encuentra a la entrada del puente, también hay una especie de poema en el que se menciona que el encargado de la construcción fue Cayo Julio Lacer: “El puente, destinado a durar por siempre en los siglos del mundo, lo hizo Lacer”.

El pasado mes de marzo de 2021, la Junta de Extremadura anunció que habrá un nuevo puente sobre el río Tajo, para liberar al romano del tráfico rodado y hacer posible la promesa de inmortalidad de los romanos. El puente 2.0 medirá 267 metros de longitud e irá paralelo al de su predecesor. 

¿Hay más tesoros romanos en España?

Sí, Hispania fue un enclave importante del Imperio romano y, afortunadamente, aún se conservan muchas muestras de ello. Las comentadas anteriormente son algunas de las más importantes, pero tampoco se pueden olvidar las siguientes:

• El Arco de Medinaceli, situado en la localidad que le da nombre, en la provincia de Soria.
• Las ruinas de Empúries, en L’ Escala, pueblo perteneciente a Girona.
• La Villa de las Musas, en Arellano, Navarra.
• Las Médulas de El Bierzo, en León.
• La muralla romana de Lugo.
• El teatro romano de Cartagena, en Murcia.
• El Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia, en Cádiz.
• El Templo Romano de Córdoba.