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Los bancos, esos asientos que suelen ser de madera y que ya forman parte del paisaje. Estructuras con o sin respaldo donde pueden sentarse varias personas a descansar, hablar o simplemente a disfrutar de la tarde. Se dice que los primeros bancos se encontraban en las iglesias ya que antes los creyentes acudían a los templos pero se quedaban de pie o de rodillas. También se encontraban en teatros, circos o cualquier lugar donde se hicieran representaciones públicas, sobre todo en época griega y romana. ¿Cómo lo sabemos? Pues gracias a excavaciones, los detalles de las pinturas, la erupción del Vesubio que sepultó Pompeya, entre otros muchos acontecimientos.
Los bancos han sobrevivido al paso de los años y poco a poco se han ido incluyendo hasta ser un mobiliario urbano imprescindible. Por supuesto, siempre tendremos las escaleras pero los bancos permiten tener una mejor postura mientras se contempla un paisaje o se intercambian opiniones con un completo desconocido. Es aquí a donde queremos llegar, a conocer los bancos con mejores vistas del territorio. Esos que te dejan sin palabras y sin aliento. ¿Preparados?
Ermita de San Marcos, Aragón
Banco de madera con vistas fascinantes al pueblo abandonado de Finestres y al gran embalse de Canelles. El propio embalse actúa de frontera y separa Aragón de Cataluña. Es hogar de la curiosa formación conocida bajo el nombre de “Muralla China de Huesca”, maravilla geológica con forma de muralla, de ahí su nombre.
Si decides acercarte, que no es fácil, podrás sentir la soledad en carne y hueso ya que las personas que suelen visitar el lugar no superan la decena al día. Los pájaros, el ruido del agua, el viento y algún que otro gato serán tus acompañantes. ¿No nos crees? Te invitamos a entrar a la ermita y echarle un vistazo al libro de visitas. Verás que tan solo cuenta con unos pocos nombres escritos el mismo día. Para llegar hasta ella tendrás que acercarte hasta la pequeña población de Estopiñán del Castillo, la puerta de entrada.
Paseo de La Concha, País Vasco
La bonita San Sebastián tenía que estar en la lista. En concreto hablamos de los dobles bancos blancos y azules (colores donostiarras) que se encuentran por toda la playa, considerada como la mejor playa urbana de Europa y quizás del País Vasco. Todos miran hacia la bahía, Isla de Santa Clara y Monte Urgull.
De hecho, los bancos del monte Urgull, con una altitud de 123 metros, son también muy conocidos ya que disfrutan de unas vistas espectaculares y casi 360 grados de toda la ciudad. También de las montañas que la rodean como el monte Igueldo y monte Ulía. Por último, llama la atención un curioso banco de madera situado en un pequeño balcón, con vistas fascinantes al Cantábrico.
Camí de ronda, altura Far de s’Arenella, Cataluña
Sí, algunos son más conocidos y otros no lo son tanto. Este punto en concreto debería serlo ya que presume de vistas fascinantes al Mediterráneo, la pequeña y blanquecina población de Port de la Selva y su bahía.
Para llegar hasta este privilegiado banco de madera tan solo hemos de comenzar a andar el tramo del camí de ronda que sale desde la misma población de Port de la Selva hasta Llançà (16 kilómetros). No hemos de completarlo ya que el banco se encuentra antes de llegar al bonito Far de s’Arenella, a sus pies. Es un camino plano, apto para bicicletas y no te llevará más de una hora en total.
Museo Paleontológico, Cuenca, Castilla-La Mancha
Es, según comentan, el segundo banco más bonito del mundo y está custodiado por dinosaurios, los jardines del Museo Paleontológico y unas vistas incomparables de la ciudad de Cuenca. Es de hierro forjado y desde allí se puede observar el bonito casco antiguo, la catedral, el hospital de Santiago y el monte Collado, presidido por la torre del Telégrafo.
Pero… ¿Por qué se le llama torre del Telégrafo? Pues porque formaba parte de una antigua línea de telegrafía óptica que unía Tarancón con Cuenca. La ciudad llegó a albergar el mayor conjunto de torres telegráficas civiles del país, el sistema de comunicación gubernamental español que había a mediados del siglo XIX. Esta torre en concreto (y otras más) permitían una rápida comunicación para su época con Madrid.
El banco más bonito de León, Riaño
Se le conoce como el banco más bonito de León y así aparece en Google Maps. Por algo será. Tiene vistas al embalse y los montes de Riaño, los cuales ya son conocidos como los “fiordos Leoneses”. Para llegar hasta él te recomendamos andar desde el centro del pueblo, como unos 10 minutos aproximadamente. Te dejamos aquí esta pequeña ruta con Wikiloc.
Está en un enclave especial y gracias a él se puede dar más visibilidad al patrimonio de Priaranza del Bierzo, como por ejemplo las impresionantes formaciones de Barrancas de Santalla o el castillo de Cornatel. Desde la estructura de madera se ven los picos Gilbo, Yordas y Las Pintas y se recomienda acercarse tanto en verano como en invierno para poder ver cómo el paisaje va cambiando con cada estación.
Mirador del Salmo, Fuerteventura
Canarias es casa de paisajes volcánicos impresionantes y playas paradisíacas que no tienen nada que envidiar a las del Caribe. Prueba de ello es la infinita playa de Sotavento, que en realidad cuenta con más de 9 kilómetros de largo. Es el rincón perfecto para practicar windsurf, kitesurf o cualquier otro deporte acuático y justo esconde un banco de madera muy colorido.
Es el lugar ideal para contemplar el atardecer, el mar, sentarse a leer o simplemente quedarse embobado viendo este curioso e infinito paisaje. Pero … ¿Cómo llegamos hasta él? Pues bastante sencillo, tan solo has de buscar en Google maps “Mirador del Salmo”, en la carretera FV- 602, muy cerca de Mal Nombre (Morro del Jable).
Banco de Redondela, Galicia
Destino imprescindible si te adentras a conocer la ría de Vigo. Quizás te suene por las islas San Simón y San Antón (curiosamente unidas por un puente), los petroglifos de Poza da Lagoa o da Cruz pero también tenemos que hacerle un hueco a uno de los bancos más bonitos. Es de madera y en su espalda encontramos grabado “ Galizia it’s different”.
El banco da paso a uno de los miradores más bonitos del territorio, con vistas a la ría de Vigo y el Puente de Rande. ¿Cómo llegar? No se puede acceder en vehículo, está en lo alto del monte de Cedeira y en Google Maps lo encontrarás bajo el nombre de Miradoiro do Campo da Rata. Como curiosidad, este banco fue destrozado y construido nuevamente por Francisco Peixoto, su creador y quien además compartió un Behind The Scenes sobre cómo se hizo.
Collado del Alguacil, Pecho Fuerte y Cerro del Calar, Andalucía
El pequeño pueblo de Guéjar Sierra, muy cerca de Sierra Nevada, ha decidido poner tres bancos en tres miradores únicos y bastante concurridos por senderistas, con vistas distintas (a la población, la sierra, etc) y aún mejores si se visitan de noche. En el Collado del Alguacil la contaminación lumínica es inexistente por lo que es un muy buen punto desde el que relajarse y contemplar el firmamento, con Sierra Nevada de testigo.
Es relativamente sencillo llegar hasta ellos pero quizás el que queda más cerca de la población es el de Pecho Fuerte. Combina la madera con el acero inoxidable y en su respaldo se puede leer “Guéjar Sierra Enamora”. Una muy buena forma de parar y respirar en lo que es un entorno paisajístico sin precedentes.
Alba Feliz
Redactora, productora audiovisual y graduada en turismo y dirección hotelera. Creo firmemente que viajar abre la mente y permite conocer otras realidades que quizás desconocemos. Me apasiona la fotografía analógica (la de toda la vida) y darle una oportunidad a los destinos menos conocidos.
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