Barcelona es mucho más que su ciudad

¿Hay algo más que decir sobre Barcelona? Pues sí, TODO. Porque Barcelona es mucho más que su ciudad. Desde la costa a la Cataluña central y hasta los Pirineos, Barcelona provincia tiene unos paisajes que arrebatan.

Te proponemos un paseo rápido por estas tres zonas, por lo común desconocidas para el viajero. Preparaos para ver paisajes, recorrer senderos históricos, involucraros en la cultura y deleitarse el paladar con sus comidas típicas.

1. Los Pirineos de Barcelona

Sí, Barcelona toca con los Pirineos. Desde la comarca del Berguedà, en Barcelona, comienza la Cataluña montañosa hacia el Norte. El símbolo es el Pedraforca, una montaña bífida integrada en el Parque Natural del Cadí-Moixerò. En este territorio de montaña y naturaleza desbordada, merece una mención especial el pueblo precioso de Rupit.

Es en esta comarca donde comienza también el Camí dels Bons Homes o Ruta de los Cátaros, un sendero de Gran Recorrido: 189 km desde el santuario de Queralt de Berga hasta el castillo de Montsegur, ya en Francia. Gaudí dejó su marca irrepetible en los Jardines de Artigas, un parque de estética modernista integrado en el paisaje a la manera de los elfos de Tolkien.

2. Paisajes de Barcelona

Esta sección integra tres comarcas de la Cataluña central: Osona, El Bages y la Anoia. El paisaje más conocido se encuentra en El Bages, donde se alza la montaña de Montserrat. Todo un símbolo. Hay quien ha dicho que sus picos son como dedos poderosos emergidos de la Tierra. Rodea a la mítica montaña un llano. En su interior, el monasterio, cafeterías y unas vistas de infarto.

Han pasado desapercibidos otros paisajes, como el de Cardona, con su castillo medieval y su Montaña de Sal. Esta última le permitió a la región convertirse en centro de poder político y económico durante la Edad Media, ya que la sal conservaba los alimentos. Un producto muy cotizado. ¿Quién no se disputaría hoy una nevera, si hubiese sólo unas pocas en el mundo?

Hay más, mucho más, pero no hay espacio para todo. No dejéis la zona sin visitar el Pantano de Sau y su antiguo pueblo, hoy sumergido. Cuando el embalse está lleno apenas asoma el campanario de la iglesia submarina. Cuando el nivel del agua es bajo, aparece el pueblo como una aparición fantasmal.

3. Costa de Barcelona

La Costa de Barcelona abraza las comarcas de El Vallès Oriental, Occidental y el Alt Penedès. No le falta de nada a la provincia, ni mar ni montaña ni la gastronomía asociada a cada una de estos climas.

La provincia de Barcelona tiene más de 100 km de costa y de tradición marinera. Los puertos de las villas podrían hilar la mayor parte de los acontecimientos históricos de la región. Pero por ahora basta con destacar la luz marítima, los colores azules del Mediterráneo y verdes de gran parte de las viñas…

Porque en esta zona de costa se integra el Alt Penedès, un territorio que viene ni que pintado para una escapada enoturística. Sigue habiendo más, mucho más en Barcelona. No queremos dejar de hacer mención siquiera al Parque Natural del Montseny, precioso, o a Sant Miquel del Fai y su salto de agua.

4. Barcelona, ciudad condal

El encanto de Barcelona ciudad es tan poderoso que debemos matizar que hay mucho más fuera de su influjo. La ciudad condal es un estupendo punto de partida para visitar toda la provincia: la Sagrada Família, el Parc Güell, el Parque Natural de Collserola, donde se ubica la montaña del Tibidabo… Coge fuerzas en la ciudad y prepárate para descubrir Barcelona, aunque parezca mentira.

Nos quedamos con ganas de contarte más, porque hay mucho más, pero preferimos que seas tú mismo quien descubra a fondo Barcelona.