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Situado entre las provincias de Ciudad Real y Toledo está Cabañeros. Un espacio natural que comprende desde el Parque Nacional Cabañeros, hasta 8 municipios donde sus vecinos llevan conviviendo en armonía con su entorno desde hace siglos. Más de 40.000 hectáreas que albergan uno de los últimos reductos del gran bosque mediterráneo en Europa: robles, quejigos, alcornoques y encinas son algunas especies arbóreas entre las que la fauna como el tejo, el loro, el águila imperial ibérica o el buitre negro, entre otros, han logrado encontrar refugio.
La conservación del parque nacional y del entorno que lo rodea ha hecho que Cabañeros sea un destino responsable y sostenible, que está unido a la Carta Europea de Turismo Sostenible y que cuenta con un Plan de Sostenibilidad Turística propio.
Municipios de Alcoba, Horcajo de los Montes, Navas de Estena, Retuerta del Bullaque, Hontanar, Los Navalucillos, El Robledo y Navahermosa, que orbitan alrededor del parque, son perfectos para una escapada rural este otoño.
En ellos podemos contactar con la naturaleza, conocer la variada fauna del lugar, relajarnos con el silencio del parque, degustar su deliciosa gastronomía de la zona y adentrarnos en la rica historia de Cabañeros.
Los centros de visitantes: lo primero es lo primero
A 1 km del casco urbano de Horcajo de los Montes está una de las primeras paradas que hay que hacer: el Centro de Visitantes del Parque Nacional de Cabañeros, el más grande de todo el parque nacional. Además de toda la información sobre los diferentes ecosistemas y sus características según cada estación del año que hay en su interior, quienes estén impacientes por ponerse a caminar tienen sendas etnográficas y botánicas que parten desde él.
Los centros de visitantes del Parque Nacional de Cabañeros son un punto imprescindible para conocer todos los aspectos ambientales y socioculturales del territorio. Así, además del de Horcajo de los Montes, se puede pasar por el Centro de Visitantes Casa Palillos, ubicado en un antiguo almacén de grano rehabilitado, entre Pueblonuevo del Bullaque y Santa Quiteria.
Dos sendas -la botánica y la etnográfica- unen el parking con el centro mediante pasarelas de madera donde hay habilitados carteles indicativos de más de 60 especies vegetales de la zona. Una de las actividades estrellas de este centro es observar en directo las intimidades de los nidos de cigüeña blanca y la lechuza común gracias a las videocámaras instaladas.
Aparte de estos dos centros existe también el Centro de Visitantes y Área Recreativa Torre de Abraham y tres puntos de información -Navas de Estena, Alcoba y Retuerta del Bullaque, además de una caseta de información en los Navalucillos.
Tiempo de berrea
Desde mediados de septiembre y hasta finales de octubre, el silencio del Parque Nacional de Cabañeros se ve interrumpido por los berridos de los ciervos. Es la berrea, la época de reproducción de estos cérvidos en la que los machos deben de mostrar a las hembras su poder para ser los elegidos y aparearse. Por ello, en ocasiones los berridos van acompañados del choque de astas por los enfrentamientos entre los machos.
Cabañeros es uno de los mejores destinos de España para presenciar este espectáculo de la naturaleza. El parque nacional ofrece visitas guiadas para ver la berrea del ciervo con un intérprete y acercarnos en todoterreno a las mejores zonas de los Montes de Toledo.
Arriba, arriba
Una vez aprendido lo más importante de la fauna en cualquiera de los centros de visitantes de cabañeros y en el Zoorama de Retuerta del Bullaque, toca avistar las especies en su hábitat natural.
Es cierto que Cabañeros es uno de los destinos otoñales más famosos de España para ver el espectáculo natural de la berrea, pero también hay mucha otra vida animal de la que disfrutar. Por ejemplo, mirando hacia arriba se pueden ver multitud de aves surcando los cielos: el águila imperial ibérica, el buitre leonado, cernícalos o el imponente buitre negro, que tiene aquí su segunda mayor colonia a nivel nacional.
Precisamente, el buitre negro uno de los símbolos del Parque Nacional Cabañeros, siendo su seguimiento prioritario para los responsables del parque. Durante el otoño, además, podremos presenciar la llegada de las grullas y de las avefrías.
Centro Turístico Singular Astronómico
Cabañeros es un destino que se caracteriza por su baja contaminación lumínica y sus cielos nocturnos, repletos de estrellas. Es el espacio ideal para practicar astroturismo, tanto en su parque nacional como en las inmediaciones de sus municipios.
El Centro Turístico Singular Astronómico de Alcoba, situado en el municipio homónimo, es una buena opción para disfrutar de las estrellas y ampliar nuestros conocimientos sobre astronomía.
El planetario está situado en un antiguo silo reformado (lugar donde se guardaba el grano) y cuenta con una sala de exposiciones y un domo geodésico en el exterior con proyecciones. Durante la visita podremos aprender los planetas, las fases lunares, todo sobre el sistema solar, etc.
Un viaje en el tiempo
Coinciden dentro del Parque Nacional de Cabañeros las formaciones montañosas más antiguas de la península ibérica. Un paisaje geológico que nos permite viajar muy atrás en el tiempo, hacia el Precámbrico y el Cámbrico. Hoy parece imposible, pero un formidable legado fósil de trilobites, cefalópodos, graptolitos y otros habitantes antiguos de la Tierra son la muestra visible de que una vez el destino de Cabañeros estuvo sumergida bajo el agua.
En el parque nacional hay cinco itinerarios que nos llevan a conocer las diversas zonas donde se presenta esta riqueza paleontológica. Uno de los más famosos es el itinerario del Boquerón de Estena, que comienza en la localidad de Navas del Estena.
Vinos de lo más singular
Hablar de vino en territorio castellano-manchego es hacerlo de uno de los mayores viñedos del mundo. El destino Cabañeros alberga dos tesoros enológicos que descubrir.
Hay que ir hasta Retuerta del Bullaque, donde se puede comenzar por conocer el trabajo que realizan en la Dehesa del Carrizal, una bodega ubicada en un entorno único y tan especial que les permite tener su propia denominación de Vino de Pago, la más alta calificación que contempla la legislación para esta Denominación de Origen Protegida y limitada a 17 bodegas españolas.
La singularidad del terroir es también esencial en las 50 hectáreas del viñedo ideado por el reconocido profesor de viticultura australiano Dr. Richard Smart que tiene Pago de Vallegarcía también en la zona. Con auténtica vocación de elaborar vinos únicos y una filosofía de pasión por el terruño.
Con buen sabor de boca
Todos los municipios del entorno del destino Cabañeros son adalides de una cocina tradicional a base de recetas sencillas y platos con personalidad propia. Son famosos los ricos guisos de caza, pero tampoco pueden faltar platos típicos como las migas, gachas, el pisto manchego o ajo blanco que se encuentran en las cartas de los restaurantes que se encuentran en los pueblos que orbitan alrededor del parque.
Mención aparte merece la producción de aceite local, de la que se pueden conocer todos los detalles en una visita al Molino de Cabañeros, una antigua almazara de aceite que se ha rehabilitado como restaurante y museo.
Tampoco pueden faltar los embutidos y quesos típicos de la zona elaborados con leche de cabra, como el caso de la quesería Valdehornos, en Horcajo de los Montes, a donde se puede acudir para conocer todo el proceso y catar in situ las mejores elaboraciones.
Artesanos de oveja de la familia Blanco Mellado y Quesos Cabañeros. Para los paladares más dulces, en las panaderías locales de Alcoba, Horcajo de los Montes, Retuerta del Bullaque y El Robledo, siempre se puede encontrar un buen surtido de productos artesanales con que alegrar el viaje de vuelta.
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