La fortaleza musulmana más grande de Europa está en Soria
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06.11.2022
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7min. de lectura
La provincia de Soria y sus alrededores nunca van a dejar de sorprendernos. Cuando creíamos conocer gran parte de ella, siempre nos asombra con nuevos rincones que visitar y fascinantes experiencias que vivir. En esta ocasión, Soria nos vuelve a sorprender con la fortaleza musulmana más grande en perímetro de Europa: el castillo de Gormaz.
Se rumorea también que esta majestuosa construcción podría ser el castillo más grande de Europa, ya que cuenta con más de 1.200 metros de perímetro, 446 metros de ancho y un total de 26 torres. Lo cierto es que no nos sorprende, incluso desde la lejanía se puede comenzar a divisar la fortificación. También pasa a la inversa, desde el propio castillo se tienen unas vistas maravillosas de los campos de Soria, las poblaciones cercanas y el río Duero.
Debido a su privilegiada ubicación, el castillo de Gormaz y sus alrededores han sido lugar de varias batallas, historias y leyendas que poco a poco intentaremos desvelar. Ojalá las murallas pudieran hablar ya que, en este caso, estamos seguros de que estaríamos horas escuchándolas atentamente.
Pasado, presente y curiosidades del castillo de Gormaz
Los inicios del castillo de Gormaz se remontan al siglo X, fue mandado construir por el califa Al-Hakam II en el califato de Córdoba y fue edificado sobre los restos de anteriores construcciones defensivas. Rápidamente, la fortificación se convirtió en una pieza clave de la defensa musulmana y ejerció de frontera junto con el río Duero entre lo que era Al-Ándalus y los reinos cristianos del norte.
Su historia va de la mano de varias luchas y batallas ya que se ubica en tierras de frontera, donde se vivían continuas ofensivas a diario durante los siglos VIII-XI. Controlar la fortaleza era tener el control de las rutas de acceso hacia el norte y, por supuesto, de la zona. Es por ello que no nos sorprende que anteriormente ya existiera una fortaleza anterior a la construida en el califato de Córdoba y que cambiara de manos y de bandos en varias ocasiones.
No fue hasta el año 1059-1060 que los musulmanes perdieron la zona y, en la época de los Reyes Católicos, el castillo de Gormaz pasó a ser una cárcel. También es conocido por ser testigo de personajes como Galib, Almanzor o Rodrigo Díaz de Vivar, El Cid. Este último fue nombrado Señor de Gormaz en 1087 y, en el Cantar del Mío Cid se describe como “castiello tan fuort”.
Desde EscapadaRural hemos podido hablar con Enrique Garrido, uno de los guías de la preciosa ermita de San Miguel. Está ubicada en la falda de la fortificación y nos comenta que: “A modo curiosidad, el alcázar tiene forma de codo y conserva un magnífico aljibe donde se almacenaba el agua. También conserva un patio de armas y algunas de las estancias”.
Asimismo, Garrido nos recomienda “Dar una vuelta por la fortificación e ir a visitar la torre oeste. De allí sale un sendero para poder apreciar la espectacular fortificación desde fuera y contemplar una serie de estelas, una romana y otra musulmana. Estas estelas eran utilizadas para ahuyentar a los espíritus malignos y proteger la fortaleza”.
Por último, Enrique Garrido también anima a que todo aquel que quiera ir a conocer la zona, pues es un lugar mágico donde historia, cultura y naturaleza se unen. Hoy en día, aunque les gustaría recibir a más turistas, cada vez son más los motoristas y coches clásicos que deciden subir hasta el castillo y contemplar la puesta de sol desde las alturas. “Les parece muy interesante la llegada y la subida al castillo”, añade.
Ermita de San Miguel, una joya sin descubrir
La preciosa ermita de San Miguel está justo debajo del castillo, es un templo prerrománico mozárabe y se construyó entorno al 1066. Es una joya sin descubrir ya que tal y como nos comenta Enrique Garrido: “Conserva arcos de herradura, una pila bautismal (donde se bautizaban a cristianos y musulmanes conversos) y sus pinturas murales”.
Es monumento nacional con la categoría de Bien de Interés Cultural y “Posiblemente se trate de una de las pocas ermitas que conserva a día de hoy las pinturas murales y que estemos ante uno de los conjuntos más completos de pintura mural de todo el país”. Llama la atención ya que con el paso de los años y debido a varios robos, las pinturas de varias ermitas e iglesias se han ido trasladando a museos u otros lugares, pero no es el caso de la ermita de San Miguel.
Estas pinturas no fueron descubiertas hasta 1996 ya que, antiguamente, se solían encalar las paredes debido a los brotes de peste y seguramente, al estar encaladas, no se encontraron hasta finales del siglo XX. Sin duda, otro motivo por el que dar una oportunidad al castillo y sus cercanías.
Qué ver en los alrededores del castillo de Gormaz
Las vecindades de la fortaleza tienen mucho que ofrecer, desde rutas en canoa por el río Duero, ir a conocer la cercana villa de Caracena y su espectacular paisaje o incluso acercarse hasta Berlanga de Duero, donde historia y cultura se encuentran en cada esquina.
El río Duero es el eterno compañero de esta zona, siendo participe de todas las luchas que han tenido lugar en Tierras Altas. Enrique Garrido nos recomienda echar un vistazo a Duero Natura, desde donde organizan rutas y alquilan canoas en el cañón de Las Truchas, disfrutando del río Duero, cerca de Vildé, Recuerda, la fortaleza Califal de Gormaz y la villa episcopal de El Burgo de Osma. Sin duda, otra forma distinta de conocer el castillo.
Otro de los atractivos es ir hasta la cercana villa medieval de Caracena, la cual fue Comunidad de Villa y Tierra y que incluso llegó a tener su propia cárcel. A día de hoy se conservan dos iglesias románicas: Santa María de la Asunción y San Pedro Apóstol (declarada Monumento Histórico Artístico Nacional) y el castillo, uno de los mejores conservados en la provincia.
También se mantiene el importante yacimiento de Los Tolmos (Edad de Bronce), la pequeña ermita de Nuestra Señora del Monte y la iglesia de San Pedro. Bellísimo templo que cuenta con un lienzo del pintor cordobés Antonio Palomino, pintor que también colaboró con la catedral de Valencia.
Algo que llama mucho la atención es la curiosa leyenda que hay detrás del origen del nombre de Caracena. Se dice que los cristianos conquistaron la población cuando los musulmanes estaban cenando. De ahí que se exclamara ¡Que cara que nos ha costado la cena!
Por último, no nos podemos ir de las tierras de la antigua fortaleza califal sin antes visitar Berlanga de Duero, hacer un tramo del conocido Camino del Cid (ruta del destierro) y leer uno de sus versos que hacen referencia a Gormaz.
No demoran el mandato de su señor,
deprisa cabalgan, andan de día y de noche,
llegaron a Gormaz, un castillo muy fuerte,
allí se albergaron en verdad una noche.
Versos 2841 y ss. CMC
Alba Feliz
Redactora, productora audiovisual y graduada en turismo y dirección hotelera. Creo firmemente que viajar abre la mente y permite conocer otras realidades que quizás desconocemos. Me apasiona la fotografía analógica (la de toda la vida) y darle una oportunidad a los destinos menos conocidos.
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