Índice
La primera ponencia del jueves 24 de mayo estuvo dedicada a la presentación de diferentes proyectos que empresarios y entidades han puesto en marcha dentro del sector rural. Los profesionales que nos hablaron sobre sus iniciativas fueron:
- Laura López, Propietaria Hotel Teatrisso (La Rioja)
- Carlos Mirapeix, Director El Capricho de Gaudí (Cantabria)
- Estela Lecea, Responsable Enoturismo y Comunicación Bodegas Lecea (La Rioja)
- Paco Parra, Presidente de Turismo Verde Huesca (Huesca)
- Nikolas Osinalde, Director de Turismo del Goierri (Euskadi)
El esfuerzo de Teatrisso
Laura López fue la primera en exponer su caso de éxito. Para ello comenzó explicando los orígenes de Teatrisso, de cómo una licenciada en marketing rehabilitó un edificio del siglo XVII que antiguamente fue una cantina, una sala de baile y hasta un teatro. «Cuando entré por primera vez en él parecía que acababa de terminar una función. Había bancos, cámaras y una atmósfera artística que me encantó», afirmó.
López también recalcó que tanto ella como su compañero Jose son de pueblo, lo que para ella significa que van de cara, que son muy hospitalarios y que colaboran con los negocios vecinos.
«Hay que aplicar la sonrisa y la hospitalidad en los negocios turísticos», dijo. Para Laura para dedicarte al turismo rural tienes que tener un carácter especial como el de la gente de pueblo, que siempre resulta muy hospitalaria.
La empresaria rural también hizo hincapié de la importancia de crear un proyecto con alma y compartió con los asistentes el espíritu Teatrissero «Vocación de servicio, una actitud por el gusto de los detalles, de la música, el teatro, la sensualidad y la buena mesa».
Para concluir, Laura López agradeció el trabajo de sus colaboradores y de los compañeros de viaje y nos animó a que todos seamos actores de una película.
El arte de El Capricho de Gaudí
El siguiente fue Carlos Mirapeix, Director de El Capricho de Gaudí. Su charla comenzó haciendo un repaso de todas las obras del arquitecto modernista catalán y el número de visitantes que cada una de ellas atrae cada año. En cabeza están la Sagrada Familia, con más de 5 millones de visitantes; le sigue el Park Güell, con 3 millones; y por detrás estarían la Casa Batlló y la Casa Milà, con 1 millón.
Mirapeix también recordó que esta es de las pocas obras que se encuentran en el entorno rural. El Capricho de Gaudí está ubicado en el pueblo de Comillas (Cantabria) y «Es una de las tres únicas obras que el arquitecto realizó fuera de tierras catalanas», explicó.
Según Mirapeix, actualmente la casa cuenta con unas 200.000 personas anuales que pueden disfrutar de visitas guiadas sin audioguía, sino que prefieren contar con el factor humano, y de un entorno privilegiado.
Comillas es un destino que, aunque está al lado del mar, tiene la ventaja de estar muy cerca de la montaña. Por sus inmediaciones discurre la Ruta del Norte del Camino de Santiago y cuenta con un patrimonio cultural extraordinario. «El turismo de patrimonio es ideal para rescatar edificios antiguos», comentó.
Respecto a los inicios de El Capricho de Gaudí, su director explicó que los inicios fueron complicados pues se basó en un modelo económico privado y no obtuvieron ayudas ni subvenciones.
La historia de la casa y su monumentalidad pudieron ser suficientes para que la obra de Gaudí ganase visitantes cada año. Sin embargo, tal y como contó Mirapeix, además del valor del recinto, su éxito también se debe a haber sido humildes, humanos y pequeños. El haber sabido mostrar que la cultura también puede ser divertida y ofrecer una programación anual destinada al viajero polifacético.
Carlos Mirapeix terminó dando algunos consejos a los futuros empresarios y emprendedores. Entre ellos el trazar un camino, pensar en grande pero actuar en pequeño, ser críticos «sin torturarse», evitar ser egocéntricos y, sobre todo, crear una red de aliados: «Nuestro equipo siempre es el principal valor», afirmó. También hay que cuidar a los prescriptores, a la competencia, la comunidad, a los proveedores y a los representantes.
Como conclusión, el empresario explicó que «El viajero urbano busca expandirse y el viajero rural lo que busca es conectar».
El éxito de las bodegas Lecea
Estela Lecea fue la siguiente en contar a los asistentes todo sobre el negocio familiar en el que se crió y en el que hoy trabaja: las bodegas Lecea. Ella pertenece a la cuarta generación y, tal como afirmó siempre han sido un «grupo pequeño con grandes retos».
Para ponernos en contexto, Estela explicó que las bodegas Lecea están ubicadas en el barrio de Las cuevas de San Asensio (Rioja Alta), donde antiguamente había más de 350 bodegas del siglo XVI excavadas en la roca y de las que hoy sólo Lecea se mantiene abierta.
Entre las buenas decisiones tomadas por su familia que han ayudado a atraer el turismo, Lecea habló de la recuperación del pisado tradicional de la uva en lagar. También organizaron la Fiesta del Pisado de la Uva, que fue todo un éxito, se aliaron con otros productores para ofrecer un mercado de productos típicos de La Rioja en los alrededores de la bodega, abrieron una tienda para realizar catas, un comedor y adaptaron sus instalaciones para el turismo. Actualmente, las bodegas Lecea cuentan con 6 edificios que eran antiguas bodegas que fueron abandonadas.
Todos estos cambios, según explicó Lecea, les han hecho destacar por encima de otras bodegas y ser reconocidos con numerosos premios. En 2016 su Fiesta del pisado de la uva fue premiada como mejor experiencia enoturística y también obtuvieron los premiso de la excelencia como Great Wine Capitals de Best of Wine Tourist. Este último debido a las características de la bodega.
Para concluir, Estela Lecea explicó algunas de las acciones que están realizando actualmente como las colaboraciones con casas rurales, donde ofrecen descuentos a sus huéspedes; tienen visitas guiadas por alguien de la familia todos los días, tanto en inglés como en español; hacen catas, donde se puede beber directamente desde la cuba; rutas por los viñedos y también ofrecen la posibilidad de sentirte agricultor por un día.
Asociación Turismo Verde de Huesca
A continuación intervino Paco Parra, Presidente de la Asociación Turismo Verde de Huesca, quien explicó en qué basa la asociación y aportó algunos datos como que cuentan con 200 propietarios y con unas 4.000 plazas. La financiación de Turismo Verde de Huesca es del 70%.
Actualmente están colaborando con 7 asociaciones que hacen lo mismo y tienen los mismos problemas. Así nació Agropil, para apoyarse entre todos aunque todavía no hayan logrado obtener subvenciones.
«Nuestro principal problema es la estacionalidad y la falta de conocimiento», afirmó Parra. No obstante, también aclaró que lo bueno es que «Uno de nuestros puntos fuertes es que estamos vivos. Conocemos nuestros problemas, así que podemos trabajar en ellos sin la necesidad de ayudas», añadió.
Según Parra, el pasado año lograron facturar más de 20.000 euros gracias a la cooperación entre los diferentes miembros. Estos son los resultados de trabajar algunos de los objetivos de la asociación como la comercialización conjunta, potenciar las redes sociales y centrales de reserva, la formación en distintos ámbitos y la creación de un laboratorio de metodología común.
La apuesta de Goierri Turismo
El último en intervenir fue Nikolas Osinalde, Director de Turismo del Goierri, quien después de citar las maravillas de la zona donde se encuentran «las Highlands vascas», explicó cómo la gastronomía fue el eje del desarrollo turístico de la región. Entre sus prestaciones, dan formación y capacitación, asesoran a socios y a ayuntamientos.
«En Euskadi tenemos el problema es que no somos costa y que hay un deporte nacional aquí que es joder al vecino», bromeó Osinalde. Luego explicó fu forma de trabajar: «Primero analizamos el destino y luego miramos los productos que pueden encajar. No como antes que se empezaba haciendo ruido».
Goierri Turismo cuenta actualmente con más de 100 empresas entre las que hay museos, ayuntamientos, comercios, etc. Para Osinalde en el turismo tiene que haber colaboración porque «Nada es nuestro. A veces empaquetizamos cosas que son de los demás», dijo.
Según Osinalde, uno de sus puntos fuertes es haber optado por la especialización de los productos según el mercado al que se dirigen. Entre los diferentes proyectos están el Territorio Idiazabal, con su ruta del queso Idiazabal; y el pasaporte gastronómico, que permite a los viajeros probar diferentes productos relacionados con la sidra y el queso, entre otros.
A raíz de diferentes alimentos se han creado rutas y experiencias que permiten poner en alza su valor. También son patrocinadores de ferias y eventos.
Laura Fernández
Periodista, blogger y viajera. No necesariamente en ese orden. En ocasiones me despierto sin saber dónde estoy. Adicta a los cómics y a los noodles con salsa de cacahuete. Redactora en @escapadarural, colaboradora en la Conde Nast Traveler y en la Divinity. Mi casa: Meridiano180.
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El relato de Mirapeix fue inspirador !