Índice
La cueva del Tesoro, también conocida como cueva del Higuerón, está situada en el municipio de Rincón de la Victoria a unos 10 kilómetros de la ciudad de Málaga. Es una de las tres únicas cuevas de origen submarino conocidas en el mundo y la única en Europa. Las otras dos se encuentran en Asia y América Central, lo que convierte a esta cueva en un tesoro geológico y turístico.
La historia geológica y humana de la cueva del Tesoro se entrelaza con la de Málaga y la Costa del Sol. Los restos arqueológicos encontrados en sus galerías nos hablan de un pasado remoto, donde hombres del Paleolítico y de la Edad de Bronce encontraron refugio y lienzo para su expresión artística en las paredes de la cueva. Además, el arte rupestre encontrado en la cueva añade un capítulo valioso a la rica historia prehistórica de Andalucía.
Formación de millones de años
La singularidad de la cueva del Tesoro en Málaga radica en su origen marino, un tipo de formación geológica que sólo comparte con otras dos cuevas en el mundo. Los procesos que dan vida a estas cuevas se inician con la acción constante de las olas sobre las rocas de las costas. La danza de las olas no solo es un espectáculo hipnotizante, sino también una fuerza erosiva poderosa que, a lo largo de los milenios, ha dado forma a las maravillas subterráneas que hoy conocemos como cuevas marinas.
Las olas atacan con especial vehemencia las zonas de debilidad en los acantilados costeros. Estas zonas pueden ser fallas o fracturas formadas durante deslizamientos tectónicos, o áreas donde se encuentran intercalados tipos de rocas disimiles y una es más débil que la otra. Con el paso del tiempo, las olas agrandan estas zonas de debilidad, excavando huecos que eventualmente se convierten en cuevas marinas
Así pues, estos procesos naturales que tuvieron lugar hace millones de años han dado lugar a esta maravilla natural, que hoy se presenta como una cueva kárstica con impresionantes estalactitas y estalagmitas que decoran sus cámaras.
Las cuevas kársticas son formadas por la disolución de rocas solubles como la caliza, el yeso y la sal, un proceso que puede llevar millones de años y que en el caso de la cueva del Tesoro ocurrió inicialmente bajo el agua. Este proceso de formación submarina es lo que distingue esta cueva de otras y lo que la coloca en una categoría única a nivel mundial. La cueva, en su tiempo bajo las aguas, fue siendo modelada hasta que, eventualmente, emergió a la superficie, mostrando al mundo una rareza geológica de incalculable valor.
Leyendas de tesoros ocultos
Además de su origen submarino, la cueva del Tesoro guarda en su interior leyendas de tesoros ocultos, lo que añade un toque místico a su ya fascinante historia geológica.
Según cuenta la leyenda, durante el siglo XII, cinco monarcas musulmanes de origen almorávide llegaron hasta esta cueva huyendo de revueltas en sus respectivos reinos y escondieron un valiosísimo tesoro en su interior. Esta narrativa se centra en el emperador Tasufín ibn Alí, el último de los cinco reyes de la dinastía almorávide. Según la leyenda, en un intento de huida de sus perseguidores los almohades, alrededor del año 1145, Tasufín ibn Alí habría embarcado el tesoro del reino hacia Al-Ándalus, y este tesoro habría quedado escondido en lo que hoy se conoce como la cueva del Tesoro o cueva del Higuerón.
Esta leyenda se ha mantenido viva a lo largo de los siglos y fue recogida en diferentes obras. Por ejemplo, en 1789, la leyenda fue documentada en la obra Conversaciones Malagueñas de Cecilio García de la Seña, seudónimo de Cristobal Medina Conde, que llegó a manos del primer propietario de la cueva, D. Enrique Laza.
¿Cómo visitar la cueva del Tesoro?
Inicialmente, el complejo estaba compuesto por tres cuevas: El Higuerón, El Suizo y La Victoria. Sin embargo, tras diversas obras, la cueva del Suizo y la cueva del Higuerón quedaron unidas en la actual Sala de la Virgen. A finales de los años 70, se decidió preservar el tramo más prehistórico de esta unión del sector turístico, aunque hoy en día ya es accesible para los visitantes junto a la cueva de la Victoria, de forma independiente a la cueva del Tesoro propiamente dicha.
La visita a la cueva no solo es un viaje a las profundidades de la tierra, sino también a las raíces de la historia humana y natural de Málaga. Los visitantes pueden disfrutar de un cómodo paseo por sus cavidades, admirando las curiosas formas que el agua ha esculpido a través de los milenios. Además, la cueva ofrece diversos servicios para garantizar una experiencia cómoda y enriquecedora, como espacios de acogida, visitas guiadas para grupos, materiales informativos, parking y aseos.
Una opción interesante es participar en visitas dramatizadas, que tienen lugar el último domingo de cada mes, con dos sesiones programadas a las 11:00 y 12:30. Estas visitas son una creación de la compañía de teatro malagueña Caliope Teatro, y son dirigidas por Aki Gamazo. Junto a él actúan las artistas Paula Millán y Nuria Berdugo, así como Juan Carlos Ledesma. Aki Gamazo no solo es el director, sino también el productor detrás de Caliope Teatro. Con una extensa trayectoria en el mundo de la actuación, ha sido galardonado con la Medalla de Oro de las Artes Escénicas en 2019 y es miembro de la Academia Malagueña de las Artes y las Letras.
Esta actividad es especialmente popular entre familias y ofrece una experiencia enriquecedora tanto para adultos como para niños, así como constituye una forma original de descubrir los secretos de esta cueva casi única en el mundo.
Sergio Parra
Etiquetas
Si te ha gustado, compártelo