Elizondo parece estar siempre envuelto en misterio. Dolores Redondo fue la que se encargó de que este pueblo, incrustado en el valle de Baztán (Navarra), tuviera esa aura misteriosa gracias a sus novelas El guardián Invisible, El legado en los huesos y su última entrega de la Trilogía del Baztán, Ofrenda a la tormenta. Su trabajo tuvo tanto éxito que hasta han creado visitas guiadas para recorrer los escenarios de la trama.
Este 2021, el nuevo anuncio de la Lotería de Navidad vuelve a traer el misterio al valle de Baztán. Como se puede ver en el spot publicitario, dirigido por Aitor Arregi, Jon Garaño y José Mari Goenaga, los vecinos del valle comienzan a recibir de forma anónima y en cadena décimos de la Lotería de Navidad. El primero de ellos va acompañado de una carta: “Queridos vecinos: he pensado que si toca este número, nada me haría más ilusión que celebrarlo con la gente que aprecio”. Los afortunados son los habitantes de Elizondo, la capital de Baztán donde está rodado el anuncio.
Los tres directores guipuzcoanos eligieron Elizondo por ser un lugar pequeño, en el que podían transmitir comunidad, por las casas que son uniformes y por la belleza de su núcleo urbano: “Nos gusta y nos parece muy fotogénica”, declararon al diario Noticias de Navarra. En el vídeo se pueden reconocer muchos de los lugares emblemáticos de la localidad, aunque otros han sido retocados.
Ruta por los escenarios del anuncio de Lotería de Navidad
El spot comienza en la calle Giltxaurdi, cubierta por un espeso manto de nieve para hacer que la imagen sea de lo más navideña. La atención se la llevan dos casas adosadas con la arquitectura típica navarra, donde viven los primeros protagonistas del anuncio quienes se animan a crear la cadena de décimos.
Según avanza el vídeo también se pueden ver otras localizaciones como el porche del edificio del parque de Baztan Ikastola y el bar Sobrino. Este último está situado en el barrio Txokoto, en el casco viejo del pueblo, donde se encuentra también una de las casonas del anuncio.
Como curiosidad, aunque los vecinos son actores, algunos de los miembros de la Agrupación Coral que cantan en la plaza de los Fueros sí eran locales, según las declaraciones de Ana Larruy, técnico de Cultura del Ayuntamiento de Elizondo para Nius Diario.
El spot también fue rodado en el pueblo de Irurita, uno de los 15 pueblos del valle de Baztán y que aparece en la primera imagen, como si se tratase de la postal de un cuento navideño.
Qué ver en Elizondo
El pueblo de Elizondo está más que acostumbrado a las cámaras y a la fama. Antes del anuncio de la Lotería de Navidad de 2021, sus calles fueron el escenario de las películas basadas en la trilogía de Dolores Redondo. Gracias a la popularidad del trabajo de la escritora, en los últimos años el turismo en la localidad se vio beneficiado.
Lo curioso es que Elizondo es de esos pueblos que no necesitan publicidad. La belleza de su entramado urbano, cortado por el río Bidasoa, con su arquitectura uniforme típica de montaña y sus vistas al Pirineo navarro son más que suficientes para hacer una escapada y acabar rendido a sus encantos.
Lo más característico de su casco antiguo es que en él abundan las construcciones nobiliarias, entre las que destacan los palacios y las casonas. Uno de los edificios más emblemáticos es el palacio de Arizkunenea, construido en el s. XVIII y de estilo barroco.
También barroco son el palacio Datue, del siglo XVII y XVIII; y el Ayuntamiento, uno de los edificios más emblemáticos de Elizondo situado en la misma plaza de los Fueros. Otras edificaciones que no conviene pasar por alto son la casa Istekonea, también conocida como del Virrey, de finales del siglo XVIII.
La abundancia de aquella época de esplendor también se puede palpar en un paseo por la calle Jaime Urrutia, donde además del palacio de Arizkunenea hay varias casonas señoriales con sus escudos. Los seguidores de la trilogía la conocerán bien, pues por ella también paseó Amaia Salazar.
Aunque el pueblo cuenta con rincones muy fotogénicos, uno de los rincones más especiales y conocidos es el del puente de Txokoto, donde está también la presa homónima. El sonido del agua y las vistas a la montaña son de lo más relajantes.
Por encima de los tejado de las casonas de Elizondo sobresalen los campanarios de la iglesia de Santiago. El templo más importante del pueblo donde se pueden encontrar símbolos templarios.
Por último, no hay que perderse una visita al Museo Etnográfico de Baztán, donde se puede ver el menhir de Soalar, un monumento megalítico de 4.5 metros de altura con grabados que fue encontrado en el siglo XX y que, después de pasar por varias fincas, fue incluso utilizado como soporte como una canasta. Por suerte, gracias al grupo Hilharriak, el monumento fue llevado al museo para su conservación.
Laura Fernández
Periodista, blogger y viajera. No necesariamente en ese orden. En ocasiones me despierto sin saber dónde estoy. Adicta a los cómics y a los noodles con salsa de cacahuete. Redactora en @escapadarural, colaboradora en la Conde Nast Traveler y en la Divinity. Mi casa: Meridiano180.
Etiquetas
Si te ha gustado, compártelo