Escapadas rurales en Barcelona para los amantes de la naturaleza

La provincia de Barcelona está abrazada por un sinfín de montañas y parques naturales que parecen mirar hacia el mar. Rincones verdes cubiertos de bosques donde realizar rutas de senderismo, BTT, recoger setas, pasear entre viñedos e incluso hacer maratones de montaña.

El Parque Natural de Montseny

Declarado Reserva de la Biosfera, el Parque Natural de Montseny es uno de los lugares más bonitos de los alrededores de Barcelona. En él se pueden encontrar infinidad de rutas para todos los gustos y niveles.

Una de ellas es la que va de Viladrau a Collformic: 9,6 kilómetros de trayecto por bosques de castaños, hayas, robles y encinas. El itinerario corresponde a la última etapa de la ruta del Meridiano Verde, que va desde Dunkerque-París hasta las playas del Maresme.

El camino que sale de la plaza de Viladrau corresponde a la octava etapa y nos lleva a través del macizo del Montseny hasta Collformic, pasando por algunos lugares llenos de historia como el santuario de la Virgen de la Erola y la ermita de San Miguel de los Barretones. El punto más alto de la ruta es el cuello del Plan de la Barraca (1.363 metros), la dificultad es media-alta y en total el tiempo estimado es de 2 horas y 50 minutos.

De Collformic podemos seguir la pista del Meridiano Verde hasta Cànoves, poco más de 20 kilómetros de dificultad media. Esta es otra de las rutas más populares del Montseny porque pasa por uno de los árboles más monumentales y longevos del parque: el castaño de Can Cuch.

Si se prefieren rutas algo más complicadas, con dificultad alta, podemos realizar la que discurre entre el Montseny y Tagamanent. Se trata de la primera etapa de Els tres monts, que pasa junto a la ermita de San Martín de Montseny, el molino del Adrobau y Vilar de la Castaña hasta llegar al Plano de la Calma, a más de 1.100 metros de altura.

En el Parque Natural del Montseny se organiza el Maratón de Montaña del Valle del Congost, una carrera que pasa por los pueblos de Aiguafreda, Sant Martí de Centelles, Figaró y Tagamanent.

Paseos entre viñedos en el Alt Penedès

Conocida como la región vitícola por excelencia del área de Barcelona, el Penedès alterna las catas de vinos con los paseos por sus viñedos. Uno de los municipios con más superficie dedicada al cultivo de la uva para la producción de los populares vinos y cavas Denominación de Origen es Subirats, en el Alt Penedès. No es de extrañar que aquí haya hasta 9 rutas de, en total, 34 kilómetros. Todas transcurren por viñedos donde, a través de paneles informativos, podemos conocer las variedades de uva que se cultivan.

Otro itinerario conocido del Alt Penedès es el Camino del Samsó, un trayecto fácil que se realiza en 5 horas y que recorre la cuenca del río Foix y de la riera de Pontons entre viñedos.

Si lo que se desean son tramos más largos para realizar en diferentes días, entonces podemos decantarnos por la ruta Penedès 360 grados. Una ruta que cuenta con diferentes etapas y que se puede hacer en bicicleta o andando. En este último caso, el recorrido es circular, son 151 kilómetros repartidos en 8 etapas y tiene una dificultad media. La ruta parte de Sant Sadurní d´Anoia.

En el caso de querer hacerlo en bici, entonces podemos escoger entre el slow bike, un itinerario circular de fácil recorrido de 49 km dividido en 4 etapas; o en BTT, mucho más técnico, con 281 km y un desnivel de 7.000 m que se pueden hacer entre 3 y 5 días. Este último camino llega hasta Sitges.

Las espectaculares montañas del Berguedà

Un apacible paseo por la sierra de Catllaràs nos llevará hasta uno de los tesoros naturales de la comarca de Berguedà: el hayedo de las Espinedes, un espacio cubierto de árboles centenarios con más de 30 metros de altura. La ruta se puede realizar desde La Nou del Berguedà y Malanyeu, entre bosques de encinas, hayas y robles.

Otro de los rincones favoritos de los senderistas en Berguedà es el Parque Natural del Cadí-Moixeró, el segundo parque más grande de Cataluña que está situado en el Prepirineo, entre las provincias de Barcelona, Girona y Lleida.

En él hay numerosos senderos señalizados para todos los niveles. Los más experimentados se atreverán a subir hasta el Pedraforca (2.506m), la montaña catalana más popular. O a hacer travesías de varios días como la de Cadí 360 grados, de 3 días; y la de Cavalls del Vent, de 6 días.

El Parque Natural del Cadí-Moixeró también acoge dos de las competiciones más complicadas de Cataluña: la Carrera de Montaña Berga-Rasos-Berga, 26 kilómetros de recorrido con un desnivel de 3.600 metros; y Ultra Cavalls del Vent, 100 kilómetros que discurren junto el Torrent dels Empedrats con un desnivel de 13.300 metros.

Naturaleza de Osona

Una de las mejores formas de conocer la belleza de los alrededores de Osona es siguiendo el río Ter. La ruta que se prolonga a lo largo de su cauce está dividida en tres etapas que van desde Farga de Bebié a Torelló (4 horas); de Torelló hasta Manlleu (5 horas); y de Manlleu a Sau (6 horas).

Otra ruta sencilla es la del Sendero de Tona. Un recorrido de 6 horas que llega hasta la colina de la Muntanyola y pasa junto a la ermita de San Esteban. También se puede realizar en bicicleta.

Entre Osona y La Garrotxa no hay que dejar de visitar una de las joyas naturales de la sierra de Llancers: el hayedo de la Grevolosa, con árboles centenarios de 40 metros de alto y 1 metro de diámetro.

Otras rutas muy recomendables de la provincia de Barcelona son la Ronda Codinenca, ideal para conocer el Vallès Oriental; La Ruta del Sol Azul, de 5 horas de duración y con unas excelentes vistas del Baix Llobregat; y la Ruta de la Batalla de Prats del Rei, que discurre de forma circular por la comarca de Anoia y recorre los escenarios donde se libraron las batallas más importantes de 1714.