Sol, playa y montaña: los colosos más emblemáticos de Alicante
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22.08.2023
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Durante décadas la provincia de Alicante se ha vendido como un destino de sol y playa; y se sigue haciendo, bajo el paraguas de la marca Costa Blanca que se creó en la segunda mitad del siglo XX. El máximo exponente de este modelo es, sin duda, Benidorm, esa ciudad que se construyó en los 60 sobre un pequeño pueblo costero y que rompió los esquemas urbanísticos, con tantos defensores como detractores.
Desde la playa de Llevant de Benidorm, si miráis hacia el interior, veréis una imponente montaña a la que parece que le falta “un trozo”: es el majestuoso Puig Campana, que se alza sobre una larga cordillera que parece no tener fin, como el mar en el horizonte. En otro destino costero muy turístico, Altea, divisamos algo parecido: una gran sierra que protege las espaldas del municipio, Bèrnia. Por no hablar de Dénia, donde siempre nos acompañará la supervisión del macizo del Montgó.
Son solo algunos ejemplos de emblemáticas montañas que nos atraen desde un plácido baño en las aguas del Mediterráneo y nos invitan a conocer el interior de Alicante. De hecho, está considerada una de las provincias más montañosas de España. Aunque las cumbres no son demasiado elevadas (el techo es Aitana, con 1.556 metros), hay más de 50 que superan los mil metros y otras presentan fuertes desniveles pasando del nivel del mar a los 753 metros del Montgó, por ejemplo. Estos son algunas de las montañas más altas de Alicante.
Aitana (1.557 metros)
Es la montaña más alta de Alicante y está en el extremo más oriental de la cordillera Bética, en las comarcas de la Marina Baixa y El Comtat. Tiene ascensiones por diferentes municipios: Benifato, Confrides, Sella (pueblo muy bonito que vale la pena visitar) y Alcoleja. Hay una parte en la cima que tiene restringido el acceso porque es una antigua base militar (desde hace décadas, en desuso) y que hace que se identifique fácilmente desde lejos por sus características “bolas blancas”.
Puigcampana (1.410 metros)
Desde la costa de Benidorm, tiene esa perspectiva de que parece que le falta “un trozo” a la montaña; viéndola desde el sur, presenta la imagen de un gran coloso. Está en el término municipal de Finestrat, un pequeño pueblo de cuestas y callejones con encanto. Tiene una alternativa de “kilómetro vertical” por una pedrera, para los que estén más en forma. Desde lo alto, tendréis una espectacular panorámica de las montañas y de la costa (y, por supuesto, de Benidorm).
Montcabrer (1.390 metros)
Está en uno de los entornos más frescos de la provincia: el Parque Natural de Sierra de Mariola, cerca de Alcoi. Es fácil verlo nevado en invierno. Se puede subir desde diferentes pueblos, como Agres (conocido por sus cavas) o Cocentaina (con una importante feria del 29 de octubre al 1 de noviembre).
El Menejador (1.354 metros)
Está dentro del Parque Natural de la Font Roja, en la comarca de l’Alcoià, uno de los más visitados de Alicante, con un bosque mediterráneo con una rica biodiversidad. En la ascensión se puede pasar por puntos de interés como el Pla de la Mina o el Santuario de la Font Roja.
El Maigmó (1.296 metros)
Otro pico emblemático que se puede ver desde diferentes puntos de la misma ciudad de Alicante. Hay rutas para subir desde varias zonas; una de ellas, lleva por una zona de cadenas que no es complicada, pero hay que ir con cuidado. Los que no quieren andar mucho pueden dejar el coche cerca de la cima, en el Balcón de Alicante, un mirador con bancos.
El Despeñador (1.261 metros)
La cumbre más alta del área recreativa conocida como Xorret de Catí, en la sierra de Castalla. No te dejes engañar por el nombre: es mucho más sencillo de lo que aparenta. Podéis aprovechar para visitar el casco antiguo del pueblo de Castalla.
Penya Migjorn (1.226 metros)
Un ascenso sencillo, pero constante, desde los restos del castillo islámico del mismo núcleo urbano de Xixona, pueblo por excelencia del turrón y del helado. No tiene demasiada dificultad, aunque exige una cierta forma física por el desnivel que se supera.
Cabeçó d’Or (1.209 metros)
Otra de esas grandes montañas clásicas bien visible desde otras cimas. Muy conocida por sus “cuevas del Canelobre”, de pago y con visita guiada. Es exigente y regala unas vistas preciosas de un relieve rocoso y escarpado. Un tramo final que requería de una trepada, hoy tiene unas grapas para facilitar la subida.
Serra Bèrnia (1.129 metros)
Entre las Marinas Alta y Baixa y muy cerquita de la costa se encuentra esta espectacular sierra rocosa y muy escarpada, formando una bonita cresta a la que se puede subir caminando o por vía de escalada. En vuestra ruta de ascenso no puede faltar pasar por el famoso “forat”, un túnel que desemboca en una gran cueva con vistas impresionantes de la costa de Altea y Benidorm.
Benicadell (1.104 metros)
Es la frontera natural entre las provincias de Valencia y Alicante; desde su parte valenciana (cara norte, umbría), se puede subir por Beniatjar, mientras que desde la alicantina (cara sur, solana), se hace desde Gaianes. Una preciosa ruta de senderismo.
Montgó (752 metros)
El macizo que está pegado a la costa se puede subir desde diferentes puntos de Dénia, Xàbia o Jesús Pobre. Aunque no es muy alta, tiene una cierta exigencia; pero el recorrido y las vistas de la cima pagan con creces todo el esfuerzo.
Sierra de Orihuela (634 metros)
Viajamos hasta el sur de Alicante para descubrir un macizo calizo vertical de fuertes contrastes, una joya para montañeros que podemos explorar desde la misma Orihuela o desde la cercana Callosa de Segura.
Serra Gelada (438 metros)
Un Parque Natural que cruza la costa de Benidorm a l’Albir. Aunque no lo parezca a simple vista, si la recorréis completa haréis subidas y bajadas constantes. Exigente, a la par que preciosa, con el Mediterráneo e impresionantes acantilados acompañándoos en todo momento.
Penyal d’Ifach (332 metros)
Esta sorprendente roca que se alza en medio del mar en Calp nos ofrece una espectacular ruta senderista de unos 5 kilómetros (ida y vuelta). Tiene algún tramo de trepada, nada que deba asustar a quien está acostumbrado a andar por montaña. Ojo con las gaviotas, ¡este es su terreno!
Raquel Andrés
Periodista y aventurera. Colaboradora en Escapada Rural, Diari Nosaltres La Veu, La Vanguardia y otros medios. Habitante y amante de las zonas rurales, sea cual sea el destino. Procuro escaparme una vez por semana con las botas de montaña, el arnés o el neopreno. En mi mochila nunca falta saco ni esterilla. Ah, también soy un intento de baserritarra.
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Y el Cid?!
efectivamente, o la sierra de Orihuela
Hola, os habéis olvidado de la sierra de Crevillente, con cumbres tan importantes como la Vella, el Picatxo y el Puntal, de mas se 800 metros de altura. Espero que lo incluyáis!!!!!!! Saludos
Hola. También está el Ponoig (1.181 metros), junto al Puig Campana, en la Marina Baixa.
Y el Reconco, precioso, desde Biar u Onol