Las Tuerces, un capricho palentino de la naturaleza

Villaescusa de las Torres es un pueblo palentino que tiene la enorme suerte de contar con uno de los espacios naturales más sobresalientes de Palencia y de Castilla y León. Hablamos del Monumento Natural de Las Tuerces, un paisaje esculpido a capricho por la madre naturaleza en el que podemos encontrar grutas, cañones, dolinas y valles de las formas más sugerentes y peculiares.

Las Tuerces son la obra de arte resultante de la acción disolutiva llevada a cabo por los procesos de erosión de origen kárstico acometidos en las rocas calizas del Cretácico superior. Una evolución lenta, pero continua, que ha diseñado un laberinto de contrastes donde lo mismo te sorprendes frente a setas pétreas gigantescas, que cruzando puentes y arcos naturales o, de repente, te ves adentrándote en cuevas sumergidas en la penumbra.

Con semejante escenario, no es de extrañar que muchos visitantes dejen volar su imaginación y lo describan como un paisaje encantado o fantasmagórico. Mágico no sabemos pero, lo que es seguro es que invita a un sosegado paseo y a la contemplación.

Pero las Tuerces no es solo un regalo para la retina, sino también un curso avanzado de la historia de esta comarca. En este paraje, así como en otros atractivos históricos y arqueológicos dispersados en un radio de no más de 5 kilómetros, se han hallado restos de diferentes civilizaciones que han pasado por estas tierras y que se remontan desde el Paleolítico medio y la Edad de Bronce hasta la reciente Edad Media.

Este desfile de roquedos, cortados y paredes vertiginosas es, como no podía ser de otra forma, el hogar elegido por varias familias de buitres leonados, roqueros rojos y chovas piquirroja. Una característica que lo convierte en un destino perfecto para los amantes del avistamiento de aves.

Senderismo en las Tuerces

Son varias las opciones para caminar y desconectar que se han habilitado en el páramo en el que se asienta el Monumento Natural de las Tuerces.

Todas las rutas de senderismo son perfectas para completarlas en cualquier época del año y tienen un nivel de dificultad bajo, excepto la ruta azul que presenta dificultad media:

La ruta roja. Conecta el pueblo de Mave con las Tuerces pasando por el espectacular cañón de la Horadada -más que recomendable- y la localidad de Villaescusa de las Torres. Tiene una distancia de 5,6 kilómetros, una duración de, aproximadamente, 2 horas y un desnivel acumulado de 179 metros.

La ruta amarilla. El punto de inicio y final son los mismos que la ruta roja pero cambia el recorrido pues, en esta ocasión, se pasa por Olleros de Pisuerga, ascendiendo hasta el Monte Cildá y continúa por el cañón de la Horadada hasta Villaescusa y las Tuerces. Tiene una distancia de 8,3 kilómetros, una duración de alrededor de 3 horas y un desnivel acumulado de 190 metros.

La ruta rosa. La localidad de Gama es el punto de partida, desde donde se asciende hasta el castillo. Ya en la fortaleza, una senda nos conduce hasta el Monumento Natural de las Tuerces atravesando la meseta caliza. Tiene una distancia de 7 kilómetros, una duración aproximada 2 horas y un desnivel acumulado de 133 metros.

La ruta verde. Comienza en el pueblo de Aguilar de Campoo con el run run del Pisuerga como compañero de ruta hasta llegar a Villaescusa de las Torres. El destino final es las Tuerces. Tiene una distancia de 7,3 kilómetros, una duración que ronda las 2 horas y un desnivel acumulado de 186 metros.

La ruta azul. Esta última opción comunica los pueblos de Mave y Gama, pasando por el enclave burgalés de La Rebolleda y la ermita rupestre de San Pelayo. Es la de mayor longitud. Tiene una distancia de 9,2 kilómetros, una duración de 3:30 horas y un desnivel de 182 metros.