Museo de belenes: los más de 100 pesebres de Mollina
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09.12.2023
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Una estrella con cola hecha de cartón y papel de aluminio, un portal para acoger a la familia del niño Jesús, la mula, el buey y los tres Reyes Magos montados en sus camellos. Esos son los elementos básicos del Belén que se pueden encontrar en cualquier casa española que lo monte con la llegada de la Navidad.
A esas piezas se le pueden ir sumando más adornos y figuritas como el río hecho con el mismo papel que la estrella, un puente, musgo, animales (gallinas, cerdos, patos), personas haciendo cosas y un caganer, generalmente en Cataluña aunque su popularidad se ha extendido más allá de sus fronteras. Los más atrevidos utilizarán también nieve falsa en spray para darle un toque más navideño y restarle más puntos aún al posible rigor histórico de la escena. Pero todo sea por celebrar y pasar un buen rato.
Más atentos a la veracidad son los ejemplos de belenes que se reúnen en el Museo Internacional de Arte Belenista situado en la localidad malagueña de Mollina, a menos de 70 kilómetros de la capital de la provincia. Su creación y mantenimiento se debe a la Fundación Díaz Caballero, creada en 2006 y dirigida por el matrimonio formado por Antonio Díaz y Ana Caballero y sus descendientes Antonio Jesús y Ana María.
El museo ocupa 5.000 metros cuadrados y alberga más de 100 belenes (33 nuevos) y miles de figuras
El proyecto surgió cuando la pareja conoció a Antonio Bernal, un belenista de Arcos de la Frontera que necesitaba resguardar su colección después de la destrucción de su casa. De hecho, en la página web del centro explican que, en concreto nació: “del sentimiento de exasperación al ver sus promotores como, cada año, belenes artísticos de una calidad extraordinaria se tenían que destruir porque sus autores no disponían de espacio para almacenar sus propias obras”.
Aunque empezó con una sala de 150 metros cuadrados, ahora el museo ocupa 5.000 metros cuadrados y alberga más de cien belenes (33 nuevos) y miles de figuras. Todas las piezas proceden de donaciones y vienen de todas partes del mundo, aunque las que más abundan son españolas e italianas. Al fin y al cabo, son dos de los países en los que la tradición belenística está más arraigada. Su colección es tan completa y su labor de conservación tan exhaustiva que, a principios del pasado mes de noviembre, el museo consiguió una de las cinco Medallas de Oro Un-Foe-Prae que concede la Federación Internacional Belenista.
Pese a que el belén es un elemento ligado sin ninguna duda a las fiestas de Navidad, el interés por estas obras no decae durante el año y el museo puede visitarse en cualquier época. De hecho, este año, nos explican de Comunicación Museo Internacional de Arte Belenista Fundación Díaz Caballero: «hemos cambiado un tercio de la exposición, de los 100 belenes que se pueden ver 33 son nuevos».
El recinto tiene dos zonas diferenciadas: una es el interior del edificio, que es donde están las obras y otra el exterior, en donde se puede ver una exposición de almazaras, una casa popular de Andalucía así como diferentes aperos de labranza.
En el vestíbulo, los visitantes pueden ver un arco de la victoria creado por Angela Tripi, una belenista italiana, que recrea el que se erigió en Roma para conmemorar el triunfo de Constantino I el Grande en la batalla del Puente Milvio. Este fue el primer emperador romano que permitió el culto al cristianismo, de ahí que se haya representado ese monumento. Asimismo, se puede observar a San Francisco de Asís, el patrón de los belenistas, firmado por el escultor sevillano José Ángel García. Según cuenta la tradición, en 1223, montó en Italia el que sería el primer belén de la historia como lo conocemos.
El museo está dividido en siete salas en las que se recogen dioramas [que son pequeñas escenas que se observan a través de ventanas], cúpulas y belenes de grandes dimensiones. Algunos de estos últimos ocupan una sala entera como el de Antonio Bernal (Arcos de la Frontera), el Monte Sacro de José Luis Mayo (Madrid) y Andalucía en Navidad de Vicente Rodríguez (Puerto de Santa María), en el que están presentes todas las provincias de la comunidad y mide 25 metros de largo.
Entre las piezas reunidas hay una importante presencia de la escuela catalana, la escuela de Monte San Pietro y también belenistas y autores de relevancia internacional como Claudio Mattei, Antonio Pigozzi o Raffaele de Angelis.
Otros dos museos de belenes en España
La tradición de representar en figuras –o incluso con personas reales– el alumbramiento del niño Jesús está más arraigada de lo que quizá se piensa en la cultura del país. De hecho, el museo malagueño no es el único del Estado sino que hay diversos repartidos por el resto de la península gracias a los cuales se puede ver la recreación del portal y el pesebre durante todo el año. Y un dato: desde junio de 2022, el belenismo es Patrimonio Cultural Inmaterial de España.
Museo de belenes del mundo
Ubicado en Ojós (Murcia), reside en una de las tres casas blasonadas de la localidad y en él se pueden ver más de 235 conjuntos de belenes de los cinco continentes. Entre ellos hay desde los nacimientos más sencillos hasta representaciones de más de 50 piezas, algunas de ellas con más de un siglo de antigüedad.
Museo de belenes de Alicante
Aunque en la colección abundan las piezas españolas, algunas pertenecientes a belenistas importantes como Martín Castells Martí, también hay presencia internacional. Se pueden observar representaciones europeas, con piezas de Portugal, Italia o Alemania pero también de África, Asia o países de América Latina como Perú.
Carmen López
Soy periodista y escribo sobre cosas que importan en sitios que interesan desde hace más de una década.
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