Negocios de turismo rural que funcionan y por qué #COETUR

La mesa redonda sobre la clave del éxito de los negocios rurales estuvo moderada por Joaquín Sanz, presidente de la Asociación Ascarioja (La Rioja). En ella participaron:

• Ignacio Lozano, propietario Apartamentos A Fala (Cáceres)
• Manuel Vicente González, propietario Hotel Anatur (Lugo)
• Carlos Fernández, presidente Asociación de Turismo Rural Isla Bonita (La Palma)
• María Alacuart, directora Villa Cornelius (Toledo)

Antes de comenzar con la charla, Enric López aportó algunos datos recogidos por el Observatorio de Turismo Rural sobre la satisfacción de los viajeros. «Según una encuesta realizada a 16.000 viajeros en 2017 un 48,5 están dispuestos a prescribir su última experiencia rural».

Unos datos muy alentadores por los que López ha dado la enhorabuena a los propietarios. Sobre los aspectos clave en la toma de decisiones, según los viajeros, los precios y el calendario de disponibilidad son fundamentales.

El siguiente en intervenir fue Joaquín Sanz, Presidente de la Asociación Ascarioja y moderador de la mesa redonda que, antes de dar paso a los ponentes, ensalzó las maravillas de La Rioja y sus productos como el vino. «Aunque también queremos hacer saber al sector turístico que somos más que el vino», aclaró.

A continuación dio paso a Ignacio Lozano, de los apartamentos A Fala, con una pregunta relacionada con los datos aportados anteriormente: ¿Qué es más importante el precio o el calendario?».

Según Lozano, es súper importante tener en la página web los precios actualizados. «No obstante, yo iría más allá. Los precios deben de adaptarse al tipo de alojamiento y a las necesidades de los clientes», añadió.

«Yo cambié mis tarifas dependiendo del tipo de cliente. Si tenemos a gente que se quedan más noches, ¿por qué no vamos a ofrecerle un descuento?», explicó Lozano. Asimismo, insistió en la necesidad de la transparencia y la claridad.

Lozano continuó contando cómo llegó al turismo rural y cómo buscó algo que en ese momento no existiera en su entorno rural (Cáceres). Asimismo, quiso recalcar la importancia de la colaboración con los servicios de los alrededores. «Trabajé conjuntamente con un bar que les daba el desayuno gratis a mis clientes, quienes luego ya reservaban allí la comida o la cena», explicó.

En relación con el tema, Lozano añadió que «En la sierra de Gata hemos creado un pasaporte en el que están 30 negocios. Los viajeros que tengan hasta seis sellos se llevan un premio directo». Asimismo, también ha recalcado que es importante trabajar con los medios de la comarca para que hagan difusión.

El siguiente en intervenir fue Manuel Vicente, propietario del hotel Anatur, quien habló sobre la innovación: «Yo estoy siempre buscando estrategias, cambiando precios y probando las plataformas de venta».

Hablando sobre las páginas de reservas, Vicente dijo que: «Yo vendo más caro y, en el momento de la reserva, no se puede cancelar. Es lo que mejor me funciona». En cuanto al posicionamiento, añadió que él intenta estar en todos los canales. «Procuro cuidar los detalles y vender un buen producto. Tampoco busco que el viajero sea un buen cliente, sino que salga de allí como un amigo», dijo citando algunas de las cuestiones que Evarist March lanzó en su ponencia Cómo convertir una pasión en negocio.

Joaquin Sanz recalcó que «Al final el precio más barato no es sinónimo de reserva». También explicó que si se trata directamente con el propietario es fácil que el viajero encuentre mejor precios.

Carlos Fernández, Presidente de la Asociación de turismo rural Isla Bonita (La Palma) fue el siguiente en intervenir. Para ello hizo una reflexión sobre si el turismo rural lo estaba haciendo bien. «El turismo rural está en mutación, nuestros negocios también y nosotros estamos mutando», añadió.

Acto seguido, trató el tema de la elección del modelo de negocio y el destino. Según él, el mercado está muy segmentado. Existen un montón de micro mercados: los interesados en la naturaleza, turismo de estrellas, de aventuras, de mar, etc. «En un estudio que hicimos el menos importante era el agroturismo».

Para Fernández, todos debemos saber en qué brillamos dentro de nuestro negocio. Estar bien conectados con nuestro territorio para poder conectar con el entorno rural. «Todos tenemos nuestras habilidades, que son las que se convierten en nuestras propuestas de valor». Tras animar a encontrar el alma del negocio, rechazó la idea que el 50% de los turistas nos elijan por precio, «Me parece una aberración», añadió.

Antes de dar paso a María Alacuart, Directora de Villa Cornelius, Joaquín Sanz comentó que no era partidario del turismo de sensaciones: «Menos mal que ya está pasando de moda realizar actividades que levanten emociones y recuerdos».

María Alacuart comenzó su turno hablando de la necesidad de dar al cliente una respuesta inmediata y de mantenerlos informados acerca de las actividades que se pueden realizar en los alrededores, así como las instalaciones de la casa. «Soy muy exigente en todo lo que les enseño a mis clientes», añadió. «A mí me pueden contactar a cualquier hora, yo estoy ahí para atenderles».

Alacuart afirmó ser consciente de que su casa Villa Cornelius es un negocio, por lo que lo que buscan es la excelencia: en el trato, en la limpieza y en sacar lo mejor del entorno. «Yo he conseguido que muchos de los negocios de los alrededores den servicio a la casa», dijo refiriéndose a algunos de los restaurantes con los que colaboran.

«Yo genero expectativas. No obstante, lo importante es que cuando cruzan la puerta lo que van a encontrar es siempre mejor», afirmó. También insistió en que es importante mantener la calidad y saber vender lo que te rodea, estés donde estés ubicado.

Entre las actividades de Villa Cornelius, su propietaria destacó que ofrecen descensos en kayak por el río e incluso la posibilidad de jugar al Cluedo en la casa.

Tras su exposición, Joaquín Sanz le recordó que era la única que no tiene un calendario en su página web. «Prefiero que me llamen y me pregunten porque así puedo venderles las mieles de venir en otras fechas», finalizó.