Las 4 mejores playas para visitar en septiembre

Septiembre es un mes ideal para ir a la playa. Las temperaturas se mantienen cálidas, pero no tanto como para agobiarte. Además, las personas vuelven a la rutina y eso hace que algunos destinos rurales se presenten menos abarrotados. A continuación, te dejamos algunas de las mejores playas para visitar este mes junto a los tuyos.

Vidreres y la playa de Tossa de Mar

La playa de Tossa de Mar está localizada en Girona, una de las provincias más exóticas de toda España. El agua se torna de color turquesa, la arena tiene color dorado y, en general, esta playa transmite una gran sensación de relajación. Tiene forma de luna, lo que hace que sea muy acogedora, aunque tiene suficiente amplitud.

A tan solo 30 minutos en coche se encuentra Vidreres, un pueblo ideal para pasar la noche. Te recomendamos Lloret Park-Aigua Viva Parc, una casa rural con todas las comodidades necesarias para reponer energías. Está formada por dos villas gemelas y se encuentra cercano al Macizo de Montseny, un paraje natural que cuenta con unas vistas espectaculares.

Conil de la Frontera y la playa La Barrosa

La Barrosa es una playa inmensa, perfecta para acudir con tu pareja y hacer un picnic romántico. Tiene uno de los mejores atardeceres de España y es por eso que se considera una de las mejores playas para visitar en septiembre. Además, La Barrosa cuenta con varias opciones gastronómicas a pie de playa para que puedas organizar una cena a la luz de las estrellas y relajarte escuchando el sonido del mar.

Para completar la escapada rural con una noche increíble, te recomendamos El Cortijo, una casa rural con apartamentos y un estudio que es perfecto para parejas. Está adaptado para que te sientas en pleno entorno rural con porches de madera antigua y piedra natural de la campiña de Bolonia. Además, cuenta con una piscina de arena con jacuzzi y cascada, para que puedas disfrutar también de un baño de agua dulce mientras preparas una barbacoa.

Barbate y playa de Zahara

La playa de Zahara es uno de los lugares más mágicos del sur. Su arena fina dorada y su mar de aguas cristalinas, convierte este paraje en un paraíso de la relajación. En septiembre, el número de visitantes es menor y la playa adquiere un tono muy romántico, con un atardecer espectacular. En total, cuenta con seis kilómetros de playa de arena blanca, por lo que es ideal para tener una velada con tu persona especial con el sonido del mar como banda sonora. La gastronomía de este paraje destaca por su atún y su pescaíto frito.

Cuando llegue la noche, te aconsejamos desplazarte a Barbate, donde te espera el Rincón Andaluz. Esta casa rural se encuentra en pleno Parque Natural de la Breña, a tan solo 4,5 kilómetros de Barbate y Caños de Meca. Es un emplazamiento ideal como retiro en la naturaleza para poder disfrutar de la brisa, el olor a campo y las estrellas. Además, se encuentra a tan solo cuatro minutos de la costa, por lo que puedes planificar la visita a otras playas paradisíacas.

Maro y la playa de la Caleta

Maro es una aldea malagueña con una arquitectura de paredes blancas que te recordará a los pueblos típicos griegos. Se encuentra en un pequeño alto que tiene como telón de fondo el intenso color azul del mar Mediterráneo. La playa de la Caleta es una de las mejores playas para visitar en septiembre y se encuentra a tan solo 20 minutos caminando de Maro. Destaca por el agua cristalina que bordea la costa rocosa. Eso sí, cuenta con arena para poder tumbarte cómodamente y observar la increíble panorámica que presenta esta playa.

Para completar esta aventura, te aconsejamos el pueblo de Cómpeta, a una hora en coche desde Maro hacia el interior. Este asentamiento es un auténtico lujo para los sentidos. Se asienta a lo largo de una loma de manera escalonada, contrastando con el paisaje debido al color blanco intenso de las paredes. Es como transportarse a un antiguo poblado musulmán, con una arquitectura impresionante y unas calles empedradas de cuento.

Al llegar la noche, podrás alojarte en Cortijo Montes, una casa unifamiliar independiente con piscina privada y unas vistas magníficas de la sierra de Tejeda. Además, a lo lejos, podrás vislumbrar el mar y el monte Fuerte de Frigiliana en primer plano.