Índice
Córdoba es una provincia con un sinfín de lugares por descubrir. La naturaleza, el clima y la rica historia de su pasado son solo algunos de sus alicientes para visitarla. Aunque Córdoba capital se lleva toda la atención, pues es la ciudad de España con más rincones y monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sus alrededores son igual de sorprendentes.
El verdor de su paisaje se entremezcla con su peculiar arquitectura, herencia de su pasado. Los árabes dejaron tesoros como Medina Azahara, a solo 8 kilómetros de la capital de provincia. Se trata de una antigua ciudad palatina que actualmente es el mayor conjunto arqueológico de todo el país.
Aunque no es la única joya de la provincia. A continuación os dejamos un listado con ocho de los pueblos más bonitos de Córdoba situados entre parques naturales, sierras y embalses. Aunque no son los únicos, si se tiene suficiente tiempo, hay muchos más por descubrir.
Priego de Córdoba
Priego de Córdoba es una de las visitas más recomendadas. Este pueblo situado al sureste de la capital, a apenas hora y media en coche, es uno de los más bonitos de toda la región. Gracias a sus reconocidos manantiales o el arte barroco cordobés ha conseguido ser reconocido por muchos visitantes a lo largo de los años.
Entre todas las actividades a realizar podemos visitar el casco histórico que encierra el barrio de la Villa. Además, el castillo de Priego de Córdoba con origen en el siglo XV es una de las grandes maravillas arquitectónicas del municipio.
Rute
Si deseamos conocer una gran parte de la historia de la región, Rute se convierte en una opción muy interesante. Este municipio es uno de los enclaves con un mayor número de restos árabes de la zona. El pueblo nació como fortaleza defensiva del Reino Nazarí de Granada y se encuentra en el corazón de la sierra de Rute, por lo que la naturaleza rodea toda la localidad.
La gastronomía del lugar, además, es otro de sus principales atractivos. Un dulce hecho de leche y con un corazón picante llamado nenas, o los licores que allí se destilan, son solamente dos de los múltiples ejemplos. No hay que perderse las ruinas del castillo medieval de Rute el Viejo y la torre del Canuto.
Montilla
Montilla es otro de los pueblos más bonitos de Córdoba. Situado en la Campiña Sur cordobesa cuenta con algunos de los vinos más reconocidos de la zona. Así, mientras visitamos el enclave podremos degustar sus productos que complementan a la perfección los atractivos turísticos del municipio.
Por ejemplo, en Montilla podemos visitar la casa del Inca Garcilaso de la Vega, cuya decoración todavía es del siglo XVI, o el palacio de los duques de Medinaceli. Este fue la residencia oficial de los marqueses de Priego tras la destrucción en 1503 de su castillo.
Baena
Con gran tradición romana encontramos Baena. Esta localidad a menos de una hora de Córdoba dispone de todo tipo de construcciones de la época románica. Los amantes del arte y de la historia pueden deleitarse con la fortificación militar en el cerro de Minguillar o el Museo Histórico Municipal.
Además, el pueblo cuenta con múltiples templos religiosos como el monasterio Madre de Dios. Los aledaños, al mismo tiempo, ofrecen todo tipo de actividades en la naturaleza como rutas en bicicleta o paseos a pie que permiten descubrir la provincia en estado puro.
Cabra
Cambiando de estilo encontramos Cabra. Con un toque claramente barroco este municipio destaca por ser una parada obligatoria en el Camino de Pasión. Además, en él también encontramos restos árabes y romanos que recuerdan la gran historia detrás de Córdoba y Andalucía.
Muy cerca del pueblo encontramos el Parque Natural de las Sierras Subbéticas que, como en el caso anterior, nos ofrece un amplio abanico de posibilidades. Además, no se debe dejar pasar la oportunidad de visitar la fuente del río Cabra con sus imponentes cascadas.
Iznájar
En la misma sierra que Cabra encontramos Iznájar y sus espectaculares vistas junto al pantano. En este pueblo rodeado de naturaleza podemos caminar por calles realmente empinadas al mismo tiempo que disfrutamos de sus casas de color blanco y macetas azules. Todo ello consigue generar una sensación mágica mientras decidimos dónde probar la gastronomía del lugar.
Algunos lugares del pueblo como el Patio de las comedias consiguen, incluso, transportarnos a otra época. Además, Iznájar cuenta también con múltiples excursiones que permiten conocer los alrededores naturales de los que dispone. Uno de los más populares es el pantano de Iznájar, donde antiguamente estaba el pueblo que el agua anegó. En época de sequía se puede ver la chimenea de una antigua fábrica, así como el puente del Molinillo. Cuando el calor aprieta no hay que dejar de darse un chapuzón en la playa de Valdearenas.
Montoro
Si buscamos un pueblo pintoresco en Córdoba debemos visitar Montoro. Rodeado por el río Guadalquivir se encuentra en lo alto de un monte llamado «de oro» desde donde podemos observar todo el entorno natural que rodea la localidad. En el municipio, además, hallamos todo tipo de iglesias y ermitas que hacen las delicias de los amantes de este tipo de construcciones. No obstante, posiblemente una de las cosas más recordadas tras visitar el pueblo es su acceso sobre por el maravilloso puente de las Doncellas.
Dos Torres
Por último, otro de los pueblos más bonitos de Córdoba es Dos Torres. Rodeada de extensísimos campos de encinas es uno de los municipios más antiguos del valle de los Pedroches. Entre toda su belleza destaca el color a granito de la zona en las construcciones, especialmente en la iglesia de la Asunción.
Sin embargo, pese a no ser muy conocido cuenta con casas realmente antiguas del siglo XV y XVI. Por ello, es una excelente opción para descansar unos días gracias a su tranquilidad que nos permite conocer la zona natural o el pueblo sin excesivas aglomeraciones típicas de las localidades más famosas.
Albert Martinez
Etiquetas
Si te ha gustado, compártelo