Qué ver en Aveiro en un día

Una pequeña red de canales se adentran en la pintoresca localidad de Aveiro. Por ellos navegan los moliceiros, unas coloridas embarcaciones que antiguamente los vecinos utilizaban para salir a pescar y recoger el sargazo que se iba acumulando en las costas debido a las corrientes marinas. Hoy, la gran mayoría son utilizadas para el turismo. Para navegar apaciblemente por las aguas que recorren esta ciudad universitaria y que han hecho que Aveiro sea llamada la pequeña Venecia portuguesa. 

Sin entrar en odiosas comparaciones, pues apenas tienen que ver, Aveiro es posiblemente uno de los pueblos más bonitos de Portugal. Su alegre arquitectura del barrio Beira Mar y de su Costa Nova, los edificios modernistas repartidos por todo el municipio y el agua son su seña de identidad. 

El pueblo está situado a orillas de la ría homónima, en cuya entrada forma un lago de agua salada con salida al mar donde están las salinas de la localidad. Desde hace siglos, los vecinos de Aveiro se dedican a la extracción de la sal, uno de los pilares económicos junto con la pesca, básica en su gastronomía más tradicional. 

Aunque para disfrutar sus alrededores y sumergirnos en su cultura local hace falta tiempo, en esta mini guía os proponemos algunos planes sobre qué ver en Aveiro en un día, aunque querrás quedarte mucho más. 

Cómo llegar a Aveiro

Aveiro está situada en la costa, entre las ciudades de Oporto y de Coímbra, por lo que es perfecta para una escapada. Desde Oporto hay poco más de 70 kilómetros, que se pueden realizar tanto en coche como en bus o tren. Este último sale de la estación de Porto-Campanhã y tarda unos 55 minutos. Para enlazar con este tren, si estamos en el centro de la ciudad, habrá que ir a la estación São Bento. El billete cuesta unos 10 euros. 

Qué ver en Aveiro 

Por la mañana 

Descubrir el barrio Beira Mar

Beira Mar es el barrio más antiguo de Aveiro. También es el más pintoresco, donde aún se conservan las antiguas casas de los pescadores, cada cual más colorida. Están situadas a orillas del canal, por eso muchas de ellas en sus bajos tenían almacenes donde guardaban la sal y otras mercancías. Es un barrio alegre, turístico y universitario, por lo que goza de un ambiente alegre y juvenil. En él se pueden encontrar muchos restaurantes y cafés. 

En Beira de Mar destacan los colores chillones, aunque en el barrio también es posible encontrar iglesias manieristas y barrocas como la capilla de São Gonçalinho y la iglesia de Nossa Senhora da Apresentação. En la primera de ellas, en São Gonçalinho (s. XVIII), en el mes de enero se celebra una original fiesta en la que se lanzan desde el balcón de la cúpula cavacas (un dulce típico compuesto de huevo, harina, azúcar, aceite y vainilla) a los asistentes, quienes los atrapan con redes, paraguas, gorros, etc. 

Navegar en moliceiro por los canales

Los moliceiros son las barcas tradicionales de Aveiro y todo un símbolo en la localidad. Son embarcaciones alargadas e igual de coloridas que el barrio de Beira Mar donde se encuentran. Se llaman así porque tradicionalmente servían para recoger moliço, que son unas algas que se utilizaban en la agricultura. 

Existen muchas empresas que ofrecen navegar por los canales. También existen muchos tipos de rutas: la que discurre por el centro de la ciudad, la que permite visitar el muelle y la pesca del bacalao, la que permite ver las dunas de São Jacinto, la que se adentra en la laguna para avistar aves y la que se realiza al atardecer para disfrutar de la puesta de sol. 

La ruta más sencilla, la que permite conocer Aveiro, tiene unos 45 minutos de duración y el precio es de unos 13 euros (el precio depende de la ruta). El trayecto comienza donde Jardim do Rossio y llega hasta el edificio de la capitanía marítima. Se navega por varios canales, por lo que se pueden ver diferentes puntos de interés. 

Plaza de la República

Después del paseo en moliceiro podemos cruzar a la otra parte del casco antiguo de la ciudad. Allí está la plaza de la República, que recoge la tradicional esencia lusa, con sus mosaicos típicos de la “calçada portuguesa”. En el centro de la plaza está la escultura de José Estevão, un político natural de Aveiro del siglo XIX. Alrededor de la misma está el ayuntamiento y la iglesia de la Misericordia. 

De estilo renacentista, lo que más llama la atención de esta iglesia del siglo XVII son los azulejos de la fachada, colocados dos siglos después. 

Visita la catedral Sé de Aveiro

La catedral Sé de Aveiro, también conocida como São Domingos de Aveiro, está en el casco histórico. Fue construida en el siglo XV, aunque solo una de las paredes y el cruceiro gótico de Santo Domingo que está en su interior se conservan de esa época. El edificio fue reformado en varias ocasiones, por lo que en él se pueden ver diferentes estilos arquitectónicos como el barroco, manierismo y modernismo. 

Por la tarde

Jardim do Rossio

Situado junto a la ría de Aveiro, es uno de los jardines más grandes y bonitos de Aveiro. Está rodeado de edificios modernistas como el Museo de Art Nouveau (te recomendamos su visita si tienes tiempo) y, en ocasiones especiales, en él se montan mercadillos y ferias de productos artesanales. Desde el Jardim do Rossio es desde donde parten las rutas en moliceiro y, un poco más arriba, también la lancha “Praia da Costa Nova”. 

Costa Nova

La Costa Nova es conocida por sus coloridas casetas de madera pintadas a rayas blancas y rojas, azules, amarillas, etc. Estas construcciones tan playeras eran casetas que los antiguos pescadores utilizaban como almacenes para guardar sus aparejos de pesca y cambiarse. Hoy están restauradas y muchas de ellas se alquilan para el turismo. 

La playa de Costa Nova es un enorme arenal de arena fina y dorada donde suele soplar el viento del Atlántico, por eso en sus aguas es frecuente ver surfistas o a gente haciendo kitesurf. A tres kilómetros al norte está la playa de Barra, donde se erige el faro de Aveiro, el más alto de Portugal. 

En Costa Nova no dejes de probar el Zé da Tripa, también conocidos como bolacha. Son unas crepes que pueden ir rellenas del dulce que más te guste. 

Además de en barco, a Costa Nova se puede llegar en coche y en autobús. 

Otras visitas en Aveiro

Museo del Art Nouveau

Aveiro cuenta con un montón de edificios modernistas, alrededor de 28. El museo, situado en la Casa do Major Pessoa y que supone un monumento en sí, hace de centro interpretativo de este estilo arquitectónico. En su interior explican el contexto histórico, social y cultural de este movimiento del siglo XIX, además de que se puede ver una amplia colección de azulejos. En la planta baja hay un café donde suelen tocar jazz en directo.  

Qué comer en Aveiro

Al estar al lado del mar, la gastronomía de Aveiro se compone de pescados, conservas y marisco. Algunos de los platos típicos son la caldeirada de Enguias (caldereta de anguilas) y de petingas (sardinas). Los espetos de mejillones también son muy populares y, como no, entre los pescados destacan el bacalao y la raya cocida con salsa. 

Entre todos los productos, el más tradicional es el Ovos Moles. Un dulce típico elaborado con huevo, azúcar y agua. Se puede encontrar en más partes del país, aunque son originarios de aquí. Su importancia es tal que en 2009 se fundó en la localidad la Confraria dos Ovos Moles, donde podemos acercarnos a conocer su historia y degustarlos. 

Dónde dormir en Aveiro

Si decides quedarte, Aveiro cuenta con una gran oferta de alojamientos. Algunos de ellos están localizados en pleno centro, en el barrio Beira Mar, donde podemos disfrutar del estilo y ambiente marinero. Otros, en cambio, están apartados en las afueras, para disfrutar de su entorno natural y de la playa. En el enlace de a continuación podrás encontrar todas las opciones para dormir en Aveiro.