¿Te funciona Facebook para tu casa rural?

Es muy probable que estés utilizando Facebook para promocionar tu alojamiento y por eso te pregunto: ¿te funciona?

Si me contestas que sí, me alegro por ti. Y si piensas que no, o no estás seguro, vamos a ver qué puede estar pasando.

Lo primero de todo, ¿cómo tienes presencia en Facebook? ¿A través de una página de empresa o de un perfil personal?

¿Debo estar en Facebook?

Desde luego, nadie nos obliga, pero parece claro que si queremos vender, o al menos influir en las decisiones de compra, tendremos que tener presencia en aquellos lugares en los que están tus posibles clientes. EscapadaRural es un ejemplo claro. Por eso estás aquí, porque aquí vienen tus clientes potenciales.

Podremos decir lo mismo de Facebook. Con los millones de personas que tienen presencia en esta red, con seguridad que muchos de ellos pueden ser clientes tuyos. Una razón para estar y para intentar contactar con ellos.

Los distintos modos de presencia en Facebook

Por si tienes dudas, el «perfil personal» es aquel con el que hacemos amigos (con un máximo de 5.000). Con un perfil personal eres una persona más de las muchas que hay en esta red, y puedes compartir información con tus «amigos», así como ver, comentar, dar me gusta y compartir lo que tus «amigos» de Facebook publican.

Además, puedes ver las publicaciones de aquellas empresas que sigues y crear y participar en los grupos que allí existen.

Y bien sabes lo fácil que es hacer amigos en Facebook, ¿verdad? Seguro que recibes solicitudes de amistad casi a diario, y casi seguro que tu también lanzarás estas solicitudes para aumentar la base de «amigos» que tienes.

Por otra parte, tenemos las «páginas de empresa«, aquellas destinadas a negocios, organizaciones y causas. Aquí no hay «amigos», hay «seguidores», «fans», o como les quieras llamar.

Las páginas de empresa pueden tener un número ilimitado de seguidores o fans (las hay con bastantes millones, como Zara, por poner un ejemplo cercano), que tratan —fundamentalmente— de influir en las decisiones de compra de sus seguidores, aunque no sólo eso.

Además, como quizás ya sepas, las páginas de empresas nos ofrecen una serie de características que no tienen los perfiles personales. Entre las más importantes para mí, la posibilidad de programar publicaciones y, sobre todo, las estadísticas.

En su contra cabe citar que no podemos interactuar con los perfiles personales —salvo con aquellos que comenten o compartan nuestras publicaciones—, y que no podemos participar en los grupos como empresa.

¿Cómo debo tener presencia en Facebook?

Sabiendo que existen estas dos posibilidades, puedes tener dudas. Normal. Todos las tenemos. ¿Perfil personal o página de empresa?

La teoría general —hablando de marketing— y las condiciones de uso de Facebook dicen que cualquier negocio debe tener una página de empresa. Y más importante que la teoría son las condiciones de uso, ya que si utilizamos un perfil personal que lleve el nombre de nuestro negocio, Facebook nos puede cerrar el perfil en cualquier momento.

Sí, has leído bien: cerrar el perfil, con lo cual habríamos perdido todo lo hecho desde que empezamos: amigos, publicaciones, fotos y reputación.

Quizás pienses que esto no se hace, pero una simple búsqueda en Facebook nos hace ver que son muchos, muchos los alojamientos rurales que lo están haciendo, y corriendo un gran peligro.

También cabe, porque así te ha parecido o te lo han indicado, que estés en el numeroso grupo de los que sí tienen presencia como página de empresa.

Si este es tu caso, seguramente te estarás preguntado que…

¿Qué pasa con mi página de Facebook que cada vez llego a menos gente?

Bien intuitivamente o bien porque llevas un control a través de las estadísticas (número de personas alcanzadas, número de ‘me gusta’, comentarios, veces que se comparte lo que publicas… ), habrás notado un bajón importante de resultados de tu trabajo.

Así, de entrada, no pienses que lo estás haciendo mal. No. El ‘culpable’ no eres tú, el ‘culpable’ es Facebook.

Imagino que sabes que Facebook es una empresa privada, que cotiza en la bolsa, en el Nasdaq de Nueva York. Es decir, se debe a sus accionistas-propietarios, y por tanto su obligación es obtener beneficios fruto su actividad.

Y para conseguir beneficios tiene que vender algo, su base de datos en este caso. Tiene que conseguir que las empresas paguen por hacer publicidad en su plataforma.

¿Y cómo consigue que las empresas paguen por hacer publicidad?

En primer lugar, hay un argumento muy de peso que convence a los anunciantes: la base de datos de personas que tiene Facebook. Somos capaces de llegar a un público extremadamente segmentado, prácticamente a nuestros posibles clientes, dado que podemos dirigir la publicidad exactamente al tipo de personas que nos interesa que vean nuestros ‘anuncios’: segmentación por edad, por género, por intereses, por lugar en el que viven… Es una herramienta muy poderosa si se aprende a gestionar bien.

En segundo lugar, parece que las empresas no estaban invirtiendo en publicidad en esta red tanto como los gestores de la misma querrían… así que nos han ido poniendo una ‘soga al cuello’ para hacernos pasar por el aro de sacar la tarjeta de crédito.

Me explico.

Hasta hace poco más de un año, era relativamente fácil que una publicación nuestra llegara más o menos a un 10% de nuestros seguidores de página sin problema, incluso más si nuestra publicación gustaba mucho.

Aproximadamente hace un año, Facebook decidió que cada vez que hacemos una publicación en una página de empresa solamente se la iba a enseñar a un 3% de los seguidores. ¡Un 3%! Es decir, que si tenías 1.000 seguidores, se la mostraba a ¡30!, y según si éstos reaccionaban (me gusta, comentarios, compartidos… ), se la enseñaba a más personas.

Posiblemente lo hayas notado si tienes una página de empresa.

Este año, hace muy pocos días, ha anunciado que todavía va a estrechar más el cerco a las empresas. Así que si hace un año era un 3%, ahora todavía estamos más abajo en la tasa de personas a las que muestra nuestras publicaciones.

Posiblemente también lo hayas notado, tus publicaciones cada vez llegan a menos personas. No, no lo estás haciendo mal, es Facebook que te está arrinconando. Como a todas las páginas de empresa.

Entonces, ¿qué podemos hacer?

La solución… en próximos capítulos.

Y ahora cuéntame, ¿has notado realmente una bajada de alcance de tus publicaciones en Facebook?